Cuando en los albores de 1994 a Ramón Iñiguez, Rubén Juárez, José Ángel López León y el Dr. Macías se les ocurrió hacer una “listita de películas” para proyectarlas, tal vez jamás imaginaron que esta aventura de amigos cinéfilos, fuera a crecer con el tiempo, y que llegara a convertirse en un sólido evento, que sin querer queriendo (discúlpame Chavo, por citarte sin comillas), está por cumplir ya los 16 años de vida.
Y así fue como con el transcurrir del tiempo, aquella idea cobró forma y de una incipiente “listita” de buenas películas, se dejaron venir ciclos enteros de buenas y recordadas películas, debates, programas bien elaborados, todo ello como “las cuentas de un collar”, de la primera proyección se dejaron venir una y otra, y otra más.
Y así, esta aventura fílmica recreativa se agigantó, las sesiones se fueron haciendo una costumbre en el gusto de los osados cinéfilos que poco a poco fueron dándose cita en el auditorio “Ana María Olea de Encinas” de la Biblioteca Pública “Jesús Corral Ruiz” de Cd. Obregón, Son.
Y el público respondió, y hasta la fecha se mantienen en promedio 30 a 40 personas por sesión, aun en períodos vacacionales.
El entusiasmo por las sesiones de los viernes cobró rápidamente una selecta clientela, y con orgullo, los que participamos en esta aventura recreativa cultural constatamos como el cinéfilo y el “público cinero” se da cita cada viernes.
Cuenta José Ángel, uno de los pioneros de esta idea, que al grupo de pioneros, poco a poco se le fue sumando otro grupo de cinéfilos o simplemente de aficionados al séptimo arte.
¡Hasta el Dr. Quilantán le entró al debate!
Para la programación del 2001, se convocó a un entusiasta grupo que encabezados por Ramón Iñiguez Franco, diseñaron los ciclos de todo el año. En ese grupo, cabe destacar a parte de los ya mencionados Ramón , José Ángel y el que estas líneas escribe, a gente como el Lic.Miguel Ángel Téllez, Fernando Tavares, don Pepe Escobar Zavala -cronista de Cajeme-, Silvia Rosseau, Consuelo Guadalupe Martín del Campo de la Colina, Armando Terán, Zenaida Salido Torres y por supuesto mi entrañable amigo -ya fallecido— el Dr. Leodegario Quilantán Villarreal.
De ese ciclo del 2001, cuenta José Ángel como “2001: Odisea del Espacio” abrió curiosamente el año cinematográfico y como un ameno debate permitió recordar con agrado ésta ya mítica cinta de Kubrik.
En mayo de ese mismo año, recordamos como tras una labor de equipo hicimos que el Dr. Leodegario Quilantàn Villarreal se atreviera a dirigir una sesión de debates de “la ciencia en el cine”, reacio a hablar de cine con propiedad, el buen Leodegario poco a poco fue aventándose a la labor de debatir—desde el punto de vista científico—películas tales como “El Informante”,”Erin Brockovich”, para finalmente cerrar con “Por su propio bien”, una polémica cinta de denuncia acerca de los riesgos que corren las mujeres trabajadoras en las maquiladoras en el sur de Texas, debate acalorado, que al decir de los asistentes, le llovió duro y tupido al incipiente director del debate, cuando se le ocurrió hacer un comentario en contra de las mujeres trabajadoras.
Y así sin querer, el Cine Club de la BP se encamina hacia su 16 avo aniversario, que si se compara con los más de 50 años del Cine Club de la UNAM, pues prácticamente, estamos hablando de un “chamaco” que empieza por gustarle el cine, o si Usted quiere, el cine club de CD. Obregón, pues es un buqui de casi 16 años, que quiere interesar de temáticas cinematográficas a un publico “cinero”.
Y como todo en la vida, algunas curiosidades dignas de recordar se han presentado en todo este tiempo de ciclos y debates, como por ejemplo, cuenta José Ángel, en una ocasión, sin realmente proponérnoslo, se hizo una coincidencia histórica, cuando al momento de hacer el debate de la cinta “Giordano Bruno”, alguien recordó que en las noticias de ese día, en el mismísimo Vaticano, el Papa celebraba el 400 aniversario luctuoso de este incómodo personaje de la historia eclesiástica.
De seminaristas y chinos interesados por el cine club
Y ya de lleno en temas religiosos, José Ángel recuerda una ocasión cuando se programó “La última tentación de Cristo” la controvertida cinta de Scorsese, repentinamente el auditorio se fue llenando en tres, cuatro y hasta cinco filas con un nutrido grupos de muchachos, que inicialmente se suponían eran estudiantes, pero que al final resultó ser un grupo de seminaristas que ¡hasta en camión los mandaron a presenciar la polémica cinta!
Otro comentario curioso, anota José Ángel, ocurrió cuando apenas el año pasado se proyectó un ciclo de “Cine Chino”, y lo que menos pudiera uno imaginar, repentinamente el auditorio empezó a llenarse de espectadores chinos, quienes por cierto participaron activamente con comentarios al momento del debate.
Armando Terán y la cinta “entrampada”
Por otra parte, se recuerda como en una ocasión, dentro del ciclo dedicado a” la familia en el cine”, con un público deseoso de admirar la cinta “Una familia de tantas” de Alejandro Galindo, tuvo que conformarse con presenciar “Enemigo al acecho”, debido a que la cinta (la de Galindo) se trabó en la video casetera, y ahí tienen a José Ángel y Armando Terán tratando de destrabar los indestrabable, ni para adelante, ni para atrás.
Finalmente, tras 10 o 15 minutos de batallar, y ante la desesperación del respetable, Armando se decidió sabiamente por meter de relleno la cinta en cuestión (la del enemigo), claro, con otra video casetera también como es de entenderse, la cinta de relleno, ni trataba el tema de la familia, pero al final de cuentas provocó un sustancioso ejercicio de debate, que por momentos hizo olvidar la” entrampada” cinta de Galindo.
Este incidente, que de antemano se advierte con una pequeña nota al final de los programas de mano que se ofrecen a los asistentes, con aquello de “la programación puede ser modificada por situaciones imprevistas”, y otro más, son acaso los únicos que han modificado la cartelera en los casi 16 años de funciones., bueno, salvo la función interrumpida, donde la enorme televisión falló a la hora buena. Cabe señalar, que ahora el Cine Club cuenta con proyección de cañón, y un sonido formidable.
El hecho de elaborar desde inicio de año todo el ciclo que habrá de proyectarse semana a semana, casi no se modifica, lo cual habla de un compromiso, de un respeto al público y de una enorme responsabilidad de todos aquellos quienes voluntariamente nos hemos involucrado en esta actividad, en este esfuerzo que viernes a viernes se comparte con el público.
Aprovecho la ocasión, `para enviar un saludo y una felicitación a quienes hacen posible este esfuerzo de llevar la cultura cinematográfica a la comunidad cajemense. Asimismo, hacer la invitación a los cinéfilos de corazón, para que asistan a la BP y participen en los debates al final de la proyección y sean protagonistas de intercambiar puntos de vista sobre los contenidos fílmicos.
Soy de la idea de que nuestra asistencia a las sesiones de cine club, no involucra únicamente el sentarnos a disfrutar la película, sino que conlleva un compromiso como asistentes a un acto colectivo de expresarnos ante la obra fílmica de un autor, que nos guste o no, siempre nos hará hablar a distancia.
¡Felicidades Cine Club de la BP, por tus 16 años de vida!
Correo electrónico: adolfo.gonzalezriande@gmail.com