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Ahora sí, quien no lea aunque sea un libro al año en Sonora, es porque de plano quiere seguir dejando a la entidad en los últimos lugares de lectura.
Las estadísticas no mienten: de los dos millones de sonorenses, sólo 850 mil va a una biblioteca, pero el 60% acude sólo para hacer tareas.
Lo preocupante es que de los asistentes a las salas de estudio no son necesariamente personas diferentes sino las mismas que las visitan por dos o tres veces.
Por ello, anunció María Dolores Coronel Gándara, directora del Instituto Sonorense de Cultura, se realizará el programa “Sonora lee”.
Este plan lleva como objetivo incentivar a todos los sonorenses a leer desde las escuelas y las bibliotecas, en donde se habrán de formar círculos de lectura que permitan, a la vuelta de unos cinco años, rebasar ese tope de .8 libros leídos por año en la entidad.
La meta del programa es atender a unos 260 mil sonorenses al año, enfatizó, y la edición de los libros La Revolución y La Independencia, como parte de los festejos del centenario y bicentenario de esos movimientos sociales.
Se quiere revertir la estadística de Enlace que ubica a Sonora en el trigésimo lugar de los estados del país en habilidad en la lectura, refirió.
Si es posible revertir esta situación, manifestó, pero se necesita la colaboración de todos en la formación de los círculos de lectura en las escuelas primarias, secundarias y preparatorias, así como en las 142 bibliotecas públicas del estado.
