|
Si Nicolas Winding Refn, el director danés de la cinta “Solo Dios Perdona”, dice que el arte es un acto de violencia, debemos de considerar esta frase como su lema o síntesis de su particular estilo de hacer cine.
La cinta del 2012, protagonizado por Ryan Gosling, el galán de moda en Hollywood, vuelve de nuevo con el director Refn para hacer mancuerna después del éxito de crítica de “Drive” del año 2011. Al igual que aquella cinta, la historia ronda alrededor de los ambientes de la mafia y la venganza aflora como el eje que mueve a los personajes.
La trama –aparentemente- es sencilla: Julian (Ryan Gosling) es un traficante solitario en Tailandia que esconde un pasado tormentoso. Su vida se complica cuándo su hermano es asesinado por la muerte de una prostituta. La madre le exige a Julian vengarse de la muerte de su hermano y es cuando va cayendo en una espiral de violencia en un entorno místico como lo es Tailandia.
Lo particular de esta cinta es su “atmosfera” o “puesta en escena” que articula una trama que a primera oída parecería un thriller convencional, pero es en el ritmo lento –en el buen sentido del término-, los pocos diálogos –el personaje de Gosling comienza hablar a los 20 min. del filme- y los estéticos encuadres coloridos de Tailandia hace al espectador estar ante una experiencia cinematográfica pura, en el sentido de presenciar una composición audiovisual deslumbrante sin requerir un guion fuerte, lo cual es un acierto.
La fórmula es esta: una trama sencilla, suma una bella fotografía, más una dosis de violencia con toques filosóficos o metafísicos obtienes “Sólo Dios Perdona”. Es como si a Ingmar Bergman (1918-2007) –director sueco conocido por sus películas densas y filosóficas- se le ocurriera hacer una película de acción.
Un filme donde la violencia se muestra con una perturbadora belleza, y el tono contemplativo que da el director logra hacer un filme en donde la fuerza está en el poder de sus imágenes llenas de simbolismo. Llevando a que el espectador encuentre el significado real de la historia. Película que se presentará el próximo miércoles 27 en la Biblioteca Pública a las 7 p.m. admisión gratuita.
