Con un apoyo insignificante del Instituto Sonorense de Cultura (ISC), se llevará a cabo desde este viernes 24 al miércoles 29 de noviembre el máximo evento artístico de Cajeme, el Festival Tetabiakte.
El evento que se realiza cada año para festejar el aniversario del Municipio tendrá en esta edición un reducido presupuesto de casi 3 millones 500 mil pesos, cantidad mínima comparada con los 15 millones que se destinaron este año al Festival Pitic de Hermosillo.
Si bien en ambos casos los recursos son aportados básicamente por los ayuntamientos, en la práctica cuenta sobremanera el apoyo que se recibe del Gobierno del Estado y del Congreso para captar recursos federales destinados a la cultura.
El escaso apoyo para las actividades culturales en Cajeme es señalado con frecuencia por creadores y promotores de este municipio, donde sólo un pequeño grupo cercano al director del Instituto, Mario Welfo Beltrán, recibe apoyos generosos mientras el resto de la comunidad cultural debe atenerse a sus propios recursos.
La presente edición del Festival Tetabiakte refleja esta indiferencia del ISC por lo que sucede en Cajeme pues su apoyo se limitó al envío de la Orquesta Filarmónica y la Banda de Música del Estado.
En el período que va del 31 de agosto al 15 de diciembre de este año, la Filarmónica tiene un programa de 13 presentaciones en Hermosillo, y la Banda 14 presentaciones.
En el mismo lapso, se presentarán sólo una vez en Cd. Obregón, ésta en el FT.
Y la mayor parte del costo de su presentación correrá a cargo de la Dirección Municipal de Cultura, que pagará el transporte ida y vuelta a Hermosillo, los viáticos y cuartos de hotel. El ISC sólo cubre el pago de horas extras de los músicos, los sueldos ya están contemplados en la nómina.
Al respecto, Mario Welfo Beltrán ha declarado que es muy caro mover a las orquestas fuera de Hermosillo por lo costoso que resulta la logística del traslado, viáticos y gastos generales.
Pero el director del ISC olvida que el sostenimiento de estas organizaciones musicales se realiza con el dinero que aportan todos los contribuyentes del Estado, incluyendo por supuesto a los de Cajeme.
Con tan escasos apoyos, las actividades culturales en nuestro municipio se han convertido la mayoría en eventos modestos, dignos sí, pero muy alejados de la riqueza y variedad que ostenta la cartelera cultural de Hermosillo.
Y si el apoyo del Estado es mínimo, el de la Federación es similar. Desde hace hace varios años ha sido cada vez más difícil obtener recursos o conciertos "todo-pagado" por Conaculta (hoy convertido en Secretaría).
Lo que se espera en el 2018, con una política federal que prioriza los recursos para la reconstrucción de las zona dañadas por los sismos, se reducen aún más las expectativas de nuestro máximo evento cultural.
Así, con un entorno difícil donde el tejido social se ha descompuesto por diversas razones, entre las que destacan la inseguridad y el crecimiento de la pobreza, Cajeme llega a un aniversario más con modesto Festival cultural financiado básicamente por el Ayuntamiento y con el apoyo de instituciones educativas y asociaciones civiles.