Adiós a las pistas
Sergio Anaya
Miércoles 16 de Enero de 2008
Ana Gabriela Guevara, la mejor corredora que ha tenido México, anunció su retiro definitivo de las pistas de atletismo. Y justificó esta medida en la falta de un ambiente propicio dentro de la Federación Mexicana de Atletismo.
Como es sabido, desde hace varios meses Ana ha entablado una fuerte batalla política contra el presidente de la Federación, Mariano Lara, y de paso contra Carlos Hermosillo, el máximo dirigente del deporte nacional y quien no se plegó a la propuesta de Ana para destituir a Lara.
Al no encontrar respuesta a sus requerimientos políticos, Ana Gabriela anunció ayer su retiro definitivo, pero quienes saben algo del deporte de alto rendimiento ven las cosas de manera diferente a como lo han planteado Ana y la prensa.
En realidad, dicen algunos conocedores, la sonorense se retiró porque sabía que ya no tenía posibilidad de obtener una medalla en las próximas Olimpiadas.
A sus 31 años Ana está fuera de distancia con respecto a las jovencitas de 18 a 24 años que encabezan las competencias internacionales en los 400 metros libres. Difícilmente podría superar a una de ellas –cinco o seis cuando menos- que la aventajan en juventud, velocidad y fuerza.
A pesar de ser una mujer joven, Ana es una “vieja” para las competencias de velocidad, y aunque se han dado casos de atletas que a los 30 ó un poco más de años se mantienen en primer nivel, la realidad es contundente al demostrar que en competencias donde la velocidad es el factor dominante, poco tiene que hacer un deportista de más de 30 años.
Pero si esta fue la razón principal por la que se retira Ana, eso no le quita brillo a lo que fue una gran carrera ni opaca la figura de una atleta de la que todos los mexicanos nos sentimos orgullosos.
Y la recordaremos con el cariño que se recuerda a Fernando Valenzuela, Hugo Sánchez y Julio César Chávez, los tres ídolos deportivos más grandes de México en los últimos años. Ella es la cuarta, o la primera mujer en un sitio similar.
Ana Gabriela Guevara todavía tiene mucho que dar al deporte mexicano, en particular a muchas niñas y jovencitas que pueden inspirarse y aprender de la trayectoria deportiva y personal de la sonorense.