Pau Gasol, el español de la NBA
juan.estrada@eluniversal.com.mx
Miércoles 07 de Mayo de 2008
Los Ángeles, Calif.- Ahí está ese larguirucho de la barba que tiene maravillado a su compatriota Antonio Banderas y también a David Beckham, ambos observando desde la tribuna cada movimiento suyo.
La estrella de la selección inglesa de futbol esperaba junto a sus dos pequeños a Pau Gasol en los pasillos que conducen a los lockers del Staples Center; quería estrechar su mano y presentárselo a sus pequeñines.
Los hijos de David ansiaban que el delantero español les firmara su gorras de los Lakers. Pau, sin problemas, se aprestó a atenderlos, al igual que lo hace con el resto de los fanáticos.
El jugador europeo no pierde piso y sin pensarlo dos veces se detiene a conceder entrevistas, y más cuando escucha una pregunta en castellano.
“Estoy disfrutando mucho el momento que estoy viviendo, gracias a la posición donde me han colocado”, dice lleno de orgullo.
“Para mí, los números individuales no son lo más importante, sino conseguir victorias”, señaló al iniciar esta entrevista que concede en exclusiva para EL UNIVERSAL.
Hasta mediados de esta temporada, Gasol militó con los Grizzlies de Memphis, pero hace un año que pedía su cambio a un equipo contendiente.
Así como en la duela sus compañeros lo encuentran con facilidad bajo el aro, en el área de prensa los periodistas latinos y españoles también lo hallan sencillamente, siempre de buen humor.
“La clave es que mis compañeros han sabido encontrarme siempre cuando estoy abierto y es mérito de ellos, me han sabido buscar y darme ese pase extra que a veces no se da y esta temporada hemos demostrado que tenemos la capacidad y el talento para hacerlo”, destacó Pau, quien muy probablemente acuda a los Juegos Olímpicos de Beijing con la selección española.
“Simplemente estoy aprovechando mis oportunidades, intento encontrar a mis compañeros también, mover el balón y responder cuando alguien esté sentado (en la banca), sea Kobe (Bryant) o sea Lamar Odom... en este equipo siempre habemos más elementos capaces de ser peligrosos”.
Gasol tiene un carisma especial, no tiene problemas en detenerse para charlar con sus paisanos, que a montones lo siguen en su andar en la NBA.
Es sincero, por ello es que a los cuatro vientos expuso que Memphis no tenía intenciones de ser contendiente en el corto plazo y por eso pidió salir. Tal situación se le concedió a mediados de esta temporada, para bien de él y de los Lakers.
Esa fórmula de no dejarse llevar por la fama, la aplica cuando está en la cancha. Él mismo así lo explica: “Tienes que mantener la cabeza siempre fría y permanecer concentrado, porque si caes en el juego del rival estás en peligro, tienes que establecer tu ritmo de partido y tratar de ser tú quien controle el juego la mayor parte del tiempo”.
Así de clara tiene su filosofía para el basquetbol, misma que, entre otras cosas, lo llevó ya a ser campeón del mundo con su selección y también a un Juego de Estrellas.
Pau sabe bien cuál es su papel; sabe que en este equipo podría ser monarca de la Liga, pero que los reflectores tienen siempre el mismo blanco... y no es él.
“Kobe y yo nos entendemos a la perfección, sabemos dónde está colocado cada uno, de verdad, es una sincronía muy especial”, expone en referencia a quien ya ha llevado a los Lakers al título y que este año podría ser nombrado Jugador Más Valioso. “Ir por el campeonato no sólo es una lucha de Kobe y mía; nosotros luchamos por el equipo y el equipo lucha por nosotros. Se ha logrado hacer un estupendo trabajo”.
Así, pues, Pau está lejos de sentirse la estrella, lo fua con Memphis, pero ahora las cosas son diferentes.
“Formo parte de una estructura sólida de trabajo que me permite entrar con gran fuerza a la canasta. Me siento con mucho mayor juego que hace dos meses, por ejemplo. Si sigo así podemos pelear por cosas importantes”.
Por lo pronto, mañana buscarán ganarle el segundo a Utah en las semifinales de conferencia; en la primera fase barrieron 4-0 a los Nuggets del mexicano Eduardo Nájera, para quien incluso tuvo palabras de reconocimiento.
“Siempre que enfrento a Eduardo sé que será difícil, porque es un jugador con mucha energía y duro, y por eso siempre me alegro de verle; solemos hablar un ratito durante el partido”, menciona.
Cuando la entrevista concluye, Gasol se despide cortesmente; toma el camino hacia la duela y a la altura de la puerta un brazo lo toma por el hombro; es Kobe Bryant, quien por fin encontró un comparsa, luego del divorcio con Shaquille O’Neal hace cuatro años.
Cuando el 1 de febrero se concretó su cambio, Memphis recibió a Kwame Brown, Javaris Crittenton y Aaron McKie, más dos primeras rondas de los drafts de 2008 y 2010 y los derechos que los Lakers tenían sobre su hermano, Marc Gasol.
En aquel momento, los angelinos marchaban con récord de 28-16, peleando detrás de Phoenix algo en la división Pacífico del Oeste; con la llegada del español, los Lakers terminaron como el mejor equipo de la Conferencia (57-25) y son el favorito para llegar a las Finales.