Aunque muchos de ellos tienen problemas, en ese momento los olvidaron.
Los 34 niños del albergue Itom Kari, del DIF, de inmediato reconocieron a los jugadores de beisbol de Yaquis de Obregón, pero sobre todo a la mascota “Chacho”.
El tigre causó alegría en la gran mayoría de los pequeños. En otros, llanto, hay que decirlo, pues le tenían miedo a la botarga.
Pero ya entrados en confianza, muchos le agarraron la cola, boxearon con él, le tocaron la lengua y hasta quisieron asustarlo, sólo que los asustados fueron ellos cuando el tigre los “correteaba”.
Al albergue llegaron este viernes Luis Carlos García, Ramón Martínez y Enrique Gómez, jugadores de los sotaneros yaquis, como parte del programa social del club hacia la comunidad.
El director del DIF Cajeme, Martín Mendoza Ceballos, agradeció a los beisbolistas, acompañados por Eduardo Castro Luque, gerente de Mercadotecnia del club, esta visita para dar alegría a los pequeños por unos momentos.
El albergue brinda techo, alimentación, vestido, asesoría pedagógica, atención médica, psicológica y educativa a niños con problemas de violencia familiar en sus hogares.
Y se les hizo la invitación para que asistan al estadio a uno de los próximos juegos de los Yaquis.