El defensa Rafael Márquez, de los Reds Bull de Nueva York, encabeza una rebelión de 13 jugadores de la selección mexicana que exigieron en una carta no ser convocados hasta que cambie la conducta de los directivos.
En la misiva, divulgada este martes por la prensa mexicana, los futbolistas aseguran que desde la llegada de Néstor de la Torre al cargo de director de selecciones nacionales, han recibido un trato "osco y prepotente" y se manifiestan contra el afán de protagonismo del dirigente.
La carta lamenta el trato que se le dio a la selección por participar en una fiesta el 8 de septiembre pasado y fue firmada por el portero Guillermo Ochoa, los defensas Rafael Márquez, Francisco Rodríguez, Carlos Salcido, Héctor Moreno y Efraín Juárez, los centrocampistas Andrés Guardado, Gerardo Torrado y Pablo Barrera y los delanteros Carlos Vela, Javier Hernández, Enrique Esqueda y Giovanni Dos Santos.
Ese día, después del partido amistoso que México le ganó a Colombia, algunos integrantes del equipo armaron una fiesta, supuestamente con prostitutas y un travesti y como consecuencia, Carlos Vela y Efraín Juárez fueron separados seis meses del equipo y otros 11 jugadores multados.
"Es imposible que el Ing Néstor de la Torre no se diera cuenta del evento, que cabe hacer mención y resaltar, lo llevamos a cabo después de que se rompiera la concentración", dice el documento que se pregunta dónde estaba esa noche el jefe de las selecciones nacionales.
Los futbolistas lamentaron que los medios estén tan enterados de las interioridades de la selección y criticaron aspectos internos de la selección como la ausencia del nuevo entrenador y que los jugadores hayan sometidos a una larga concentración antes del Mundial de Sudáfrica.
La carta fue escrita el pasado 22 de septiembre, horas después de que se divulgaran las sanciones a los seleccionados, pero los autores no firmaron porque, según dicen, están en distintas partes del mundo y no querían que por ningún motivo llegara a manos de la prensa.