“Difinitivo”: Este 2010 en MLB fue una temporada donde el factor dominante se llamó pitcheo y por ende culminó de la misma manera en postemporada y Serie Mundial… con dos blanqueadas en clásico otoñal de cinco partidos.
Sin contar lo sucedido en el rol regular y sus cinco juegos de no hit y dos juegos perfectos, ya vio usted el sin hit de Roy Halladay en postemporada; las formidables salidas de Cliff Lee, Derek Lowe, Roy Oswalt, Tim Lincecum, Matt Cain, el novato Madison Bumgarner, los relevos de Neftalí Feliz y Brian Wilson…
El factor pitcheo, determinante
En lo que se puede considera la Era PostEsteroides, el 2010 ha pasado a la historia como la temporada en la que se lanzaron más joyas de pitcheo a manos llenas:
El primer sin hit ni carrera correspondió a Ubaldo Jiménez, de los Rockies de Colorado, ante los Bravos de Atlanta (17 de abril, 4-0).
Luego, el 9 de mayo, Dallas Braden, de los Atléticos de Oakland, lanzó perfecto (19 en la historia de MLB) al derrotar 4-0 a las Rays de Tampa Bay.
Más tarde, el 29 de mayo, Roy Halladay lanzaría el vigésimo juego perfecto de la historia al superar 1-0 a los Marlins de Florida.
El 25 de junio, le siguió Edwin Jackson, de los Diamondbacks, con otro sin hit ni carrera (1-0 sobre las Ray).
Por último, el 26 de julio, Matt Garza, de las mismas Rays, lanzaría otro sin hit al derrotar 5-0 a los Tigres de Detroit.
¡Qué fiesta de pitcheo!
Y esto sin contar lo que padeció Armando Galarraga el 2 de junio, cuando a un out de lanzar el vigésimo primer juego perfecto de la historia (y tercero de la temporada), el umpire Jim Joyce le escatimó la gloria con un marcaje equivocado en la primera almohadilla. ¡Un claro out que marcó safe!
Ya hemos dicho que en 1968 fue también algo espectacular en el pitcheo:
En esa temporada regular, Bob Gibson, con los Cardenales de SL, marcó récord moderno con 1.12 de efectividad, y en el primer partido de la Serie Mundial, el propio Gibson abanicó a ¡17 Tigres de Detroit!
En el mismo Clásico de Otoño, Mickey Lolich ganó tres juegos… completos.
En campaña, previamente Denny McLain ganó 31 partidos (nadie ha vuelto a conseguir esa cifra) y Carl Yastrzemsky, de los Medias Rojas, fue el único en la Liga Americana cuyo porcentaje de bateo superó la cifra mágica con apenas .301 para ser el campeón bat.
Por supuesto, hubo varios juegos sin hit y el primer juego perfecto desde 1922 a cargo de Jim “Catfish” (“El Bagre”) Hunter, con los Atléticos de Oakland.
Incluso, a Don Drysdale (Dodgers) no le anotaron carrera durante 58 2/3 episodios.
Miguel Jácome Oaxaca:
“Pasado ya el vértigo de los Play-Off de las Grandes Ligas y la coronación justa y emotiva que tuvieron los flamantes campeones Gigantes de San Francisco, me encuentro con una nota sobre Mariano Rivera y su situación actual.
El escritor de la nota es el periodista estadounidense Wallace Matthews. Aborda un tema que es importante: la edad y lo que deben hacer los Yankees con Mariano Rivera.
El texto nos dice que Rivera es un hombre, es un humano, que tarde o temprano llegará la decadencia, cosa que comparto pero lejos de apretar un botón rojo de pánico o buscar explicaciones sobre que lanzadores deberían de desempeñar ese trabajo pienso que no debe de haber alarma, ni apurar procesos.
Cierto es que Mariano ya tiene su edad; que ya nos dio muchas alegrías y por eso se merece el derecho de ser contratado nuevamente...Igual y agarra du segundo aire, su vida ha sido llena de sacrificios y creo que Marianito es un hombre centrado y sabrá decir adiós con decencia y dignidad.
La vida es algo que es incierto; hoy Mariano está fuerte y bien de salud; sin embargo creo que ya está en la línea donde es más probable fracasar que ganar.
No es lo mismo una baja de juego o una lesión a los 40 que a los 20 años. Mariano tiene el beneficio de ser un hombre capaz y ganador por excelencia.
Tal vez este columnista no sepa, pero día con día en todos los rincones del planeta, en las granjas de Sonora, en los cañales de Santiago de Cuba, en las playas de Veracruz, hay un chico que juega pelota y que desea ser el nuevo héroe de los Yankees.
En las Ligas Menores hay material. El baseball es algo que está en constante renovación para bien. Siempre hay nuevos ídolos, nuevas figuras.
Se nos retiró Greg Maddux y ya está un Tim Lincecum; distintos en maneras de lanzar y de ser, pero igual de eficientes y ganadores. Se fue Glavine y está ahora un Cole Hamels.
En fin, creo que esto no es para hacer falsos dramas; nadie es indispensable. Y, con esto no menosprecio a Mariano, ni a ningun pelotero.
Imaginemos que al retirarse Babe Ruth se haya acabado el baseball. Nos hubiérmos privado de ver a Rickey Henderson o a Fernando Valenzuela...
El baseball es dinámico y renovable; quien quita y Mariano aprende a tirar "Bola de Nudillos" y "Eephus Pitch" y no se retira hasta los 55 años.
El baseball es sorpresa, improvisación, renovable, dinámico. Por eso y por muchas otras razones es el deporte más hermoso del mundo!
PD: Una vez más el baseball es muestra de respeto y amistad; la ovación que los texanos le dieron a los Giants es para el recuerdo. Muchos con casaca de San Francisco junto a los "Venados" texanos y nada de disturbio...el baseball, un espectáculo familiar”.