·¿Pitcheo contra bateo?; ¿dos equipos “tocados por el destino”?; mejor esperemos el resultado y que gane el mejor, así de fácil.
Los Yaquis saltarán al terreno por su quinto banderín; Algodoneros, por su segundo y sus estrategas, Eddie Díaz y Matías Carrillo, por su primer título en la LMP.
Visualizo una serie final muy cerrada, pareja, con ligera ventaja para los Yaquis, especialmente por su pitcheo.
Una serie que deberá ser de tú por tú, con juego rápido, certero, de estrategia y pitcheo, incluyendo el trabajo de preparadores y en especial, del “Chicote” Ayala.
Qué distantes quedaron los que fueron marcados grandes favoritos (Tomateros); el mejor equipo de la Década (Venados) y la franquicia con más títulos en este beisbol que pensaba en otro bicampeonato (Naranjeros).
La historia hoy se llama Guasave-Obregón, los que en el rol regular los Yaquis tuvieron ligera ventaja de 5-4 en ganados y perdidos.
Hoy se observan grandes simpatías hacia el algodón; después de todo, desde la temporada 71-72 no ganan un gallardete. Por lo tanto, el sentimiento inunda corazones a su favor. Han asistido a sólo tres finales en las últimas cuatro décadas.
Pero el pitcheo de la Tribu es de primerísimo nivel y los “Mosco” Arredondo, Leo Heras, Mario Valenzuela, Manny Rodríguez, Yurundell De Caster y el gigante Japhet Amador, orgullo de toda la Baja California Sur y en especial de Mulegé su tierra natal, no la tendrán nada fácil ante los abridores Luis Alonso Mendoza, Rolando Valdez, Marco Quevedo y Francisley Bueno.
Además, Eddie Díaz tiene otra arma defensiva letal: su bullpen con Marco Carrillo, Héctor Navarro, Hugo Castellanos, Mario Mendoza y el cerrador de lujo, Luis Ignacio “El Chicote” Ayala.
El Algodón fue el No. 1 en bateo al término del rol regular (.294); trae al campeón bat en el “Mosco” (.401), pero sobre todo un ritmo de juego ganador que ni le pregunte a los fans “culichis porque le va ir muy mal.
Sin embargo, en series cortas ya sabe usted que el factor fundamental se llama pitcheo y por ahí Eddie Díaz podría ir feliz de la vida a la isla borinqueña.
Los Yaquis están 8-1 en postemporada, pero sus seis días de descanso para volver a las incidencias, podría ser un factor por constatarse en la primera noche de fiebre beisbolera en el “Oroz Gaytán”.
En cambio, la gente de Matías anda en ritmo, caliente, con ímpetu y hambre de triunfo. Además, en esta postemporada se han ganado el mote de “Caballo negro”, imagine eso.
Por ambiente en la grada, olvídese, con una fanaticada que se reunirá viernes y sábado deseando volver a disfrutar lo sucedido en el 2007-2008 cuando los Yaquis obtuvieron su más reciente banderín invernal.
Las cartas están sobre la mesa.
Por ello, aquí le dejo en la mano su preferencia pensando en el que será campeón.