GUASAVE, Sinaloa -- Tras arduas negociaciones con el dueño de los Algodoneros de Guasave, el Gobierno de Sinaloa convenció a Jaime Castro para que desistiera de cambiar la franquicia del equipo de béisbol de la Liga Mexicana del Pacífico a Tijuana, Baja California.
Castro, en compañía del gobernador Mario López Valdez --ex propietario de Cañeros de Los Mochis hace algún tiempo--, hizo el anuncio de que el equipo se queda en Guasave ante la presencia de la afición de Algodoneros en el Estadio Francisco Carranza Limón la noche del jueves.
Aunque Castro fue convencido de dejar al equipo que se creó en 1970, ahora le toca al directivo comunicar la decisión a la Asamblea de la Liga Mexicana del Pacífico, para revertir el cambio. Hay dos opciones, llamar a junta extraordinaria o bien esperar la próxima reunión en la primera quincena de abril.
Apenas el viernes pasado, la Asamblea de la LMP se reunió por primera vez en el año y al presentar Castro la solicitud de cambio de franquicia, los presidentes de los siete equipos restantes y el presidente del circuito invernal de inmediato aprobaron el movimiento.
"Sinaloa no se podía dar el lujo de perder uno de sus cuatro equipos (profesionales)", dijo el gobernador López Valdez al hacer el anuncio.
"No podíamos dejar ir a los Algodoneros cuando nos trajimos al Salón de la Fama del Béisbol Mexicano (a Culiacán)", agregó.
López Valdez dijo que el impulso al deporte incluye el béisbol, por lo que se hará un esfuerzo para que los Algodoneros permanezcan siempre en Sinaloa, y no sólo eso, sino que se proyecta la modernización del estadio, o bien la construcción de uno nuevo en los próximos años, al igual que en el resto de las plazas del Estado, Mazatlán, Culiacán y Los Mochis.
El alcalde del municipio, Ramón Barajas, hizo el compromiso de apoyar el rescate del subcampeón de la pasada temporada de la Liga Mexicana del Pacífico. Entre los apoyos destaca la condonación del 8 por ciento de impuesto en taquilla y también en el tema de seguridad.
Mientras tanto, el gobernador López Valdez explicó que su administración brindará apoyos diversos que alivianen la carga impositiva del equipo, para hacerlo financieramente viable.
Asimismo, dijo que no puede promover a Sinaloa como la capital del beisbol nacional si pierde a uno de sus cuatro equipos que hoy participan en la Liga Mexicana del Pacífico, y mucho menos a uno que en los últimos años se ha distinguido como una escuadra de pelea.