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Hace unos días los promotores de Saúl "Canelo" Álvarez (entre ellos incluya usted a Oscar de la Hoya y Televisa) difundieron una supuesta entrevista en la que la mayoría de los consultado (60 por ciento) afirmaba que prefería al Canelo por encima de Julio César Chávez jr. (a quien apoyó sólo el 27 por ciento).
Pero esta encuesta es sin duda tan amañada como las que mandan a hacer los políticos en campaña, donde siempre sale adelante el que paga.
La realidad es que en los días previos a los combates que ambos sostendrán este sábado en Las Vegas (Chávez vs Martínez; Canelo vs López) ha puesto en evidencia una contundente superioridad del Hijo de la Leyenda sobre el ídolo de Televisa en lo que a preferencias, simpatías y admiración se refiere por parte de los aficionados al boxeo.
En estos momentos, a unas horas de ambas peleas, parece ser incluso que sólo la de Chávez cuenta. Casi todos los antros y sitios donde se transmitirá la pelea Chávez vs Martínez en vivo tienen sus localidades agotadas.
Los cometaristas deportivos, con excepción de los que trabajan en Televisa, centran su atención en los riesgos y ventajas de J. C. junior ante el Maravilla argentino.
La pasión está desatada y desde aquellas memorables de Julio César Chávez padre en la década de los noventa, no se había generado tanta expectativa por ver un combate a través de la televisión de paga.
Chávez prácticamente ha noqueado a Álvarez en el terreno de la popularidad.
Es evidente, no hay ninguna duda, hoy por hoy, el boxeador más seguido por la afición mexicana es Chávez junior, y después de él no está el Canelo sino Juan Manuel Márquez, el verdugo de Pacquiao.
Incluso, aunque con mucha menos publicidad que el Canelo, el Siri Salido podría subir a los cuernos de la luna cuando empiece a promoverse una posible pelea contra Nonito Donaire.
