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Preocupante el tema de los “bólidos” que ahora salen directo al pitcher, especialmente aquellos que lanzan sobre las 95 millas por hora –“a como me tiras te respondo”– como es el caso de Aroldis Chapman.
No es necesario señalar que en un juego de pelota el lanzador y bateador son los más expuestos a los golpes lo mismo que el receptor cuando se dan fuertes jugadas-encontronazos en jom. “Esto “ya está planchado”, suelen expresar los jóvenes políticos de hoy.
Lo cierto es que en el caso de los pitchers, quienes seguramente al aumentar la velocidad en sus lanzamientos, los contactos del bateador, pegándole exactamente en el centro del madero, ¡claro que se van directo hacia la loma!
Acaba de ocurrir otro “incidente” que al igual sucedió con Chapman, probable y también estuvo de por medio la vida del lanzador Matt Moore, de los Tampa Rays. Le comparto el video:
Hay otras tres referencias:
En agosto pasado, el zurdo de Toronto J.A. Happ sufrió una fractura en el cráneo al ser golpeado por una línea; en septiembre de 2012, el lanzador de los Atléticos Brandon McCarthy también sufrió una fractura en el cráneo, hemorragia epidural y una conmoción cerebral que requirió cirugía y seis días en el hospital.
El lanzador de los Rays, Alex Cobb, también hospitalizado el año pasado al ser golpeado por una línea a 102 mph.
Caray; qué bueno y sólo de niño, en Tijuana, a nivel infantil mayor, pony y colt me dio por ser lanzador con el equipo Rayos de la colonia Independencia. Cuando Miguel Cabrera Ávila (+) era el pitcher, yo era el cátcher; y cuando yo subía a la loma, Miguel era el cátcher. ¿Cómo la ve…?
Rodolfo Larios Velarde:
Tan sólo te diré lo que decía el profesor Gustavo Hodgers: “el pitcher en cuanto sulta la bola se convierte en fildeador”.
Hace mucho me pregunto: ¿qué hacen los coachs de pitcheo de Ligas Mayores que no se preocupan porque los lanzadores se se vuelvan fielder después de tirar la pelota a home?
Cierto es que están obstinados en que ganen una o dos millas más de velocidad descuidando la caída, que como dices, caen para todos lados menos frente a home.
¿Cuántos pitchers realmente se convierten el filders después de cada lanzamiento? Me atrevo a decir que cuando mucho 2 de cada 10.
Espero que lo de Aroldis Chapman preocupe un poco más a los managers y coachs de pitcheo. Saludos.
Ah!: Que los coachs de pitcheo les pasen videos de Greg Maddux y del Toro Valenzuela para que aprendan.
Carlos Castillo:
Que sorpresa más agradable para este tú amigo ver nuevamente, aunque sea en fotografía, a Víctor Sáiz, del cual tengo muy gratos recuerdos cuando actuaba en la Mexicana de verano y en esta Mérida.
Una gran persona dentro y fuera del diamante ya que tenía la oportunidad de platicar con la tercia que actuaría, en sus vestidores y escuchaba sus anécdotas y nos reíamos de muchas de ellas y escuchábamos con atención las que les habían afectado, porque como escribió un amigo periodista "umpire, profesión de mártir".
Lo que presencié en mis 40 años de anunciador oficial en los parques profesionales en Mérida, "Estadio Salvador Alvarado", el "Carta Clara" y "Kukulkán", es bastante.
Por cierto este primero de Febrero pasado, el "Salvador Alvarado" cumplió 75 años de inaugurado y colaboré con un "Recuerdo de la cátedra radiofónica". Saludos y un fuerte abrazo para Víctor.
Héctor Zaragoza:
Se dice fácil mi querido y estimado Chucho, pero 80 ya pesan. ¡Felicidades a don, pues hay que enorgullecerlo con el Don, puesto que el hombre se lo merece!
Lo recuerdo muy bien a Víctor. No tengo amistad con él, pero cuando asistía a las convenciones del Beisbol Mexicano y a la entrega de los trofeos a lo mejor de la temporada anterior, era uno de los umpires que se distinguía.
Siempre fue el número uno; no importara quien estuviera detrás del receptor. Don Víctor, fue DON Víctor.
¡¡¡Felicidades...!!! Mil Felicidades y que se repitan, ojalá y tengamos la oportunidad de alcanzarlo y tener la salud que el hombre se ve que tiene. Un Saludo especial desde Coatzacoalcos y que no le pasen el Strikiniki.
