Benjamín “Papelero” Valenzuela, quien conquistara tres cetros de bateo con la franquicia de Yaquis de Obregón, ingresó este día al nicho de los inmortales del Recinto Histórico de Yaquis,
Benjamín Valenzuela logró ceñirse la corona de bateo con los Yaquis en la vieja Liga de la Costa (1954-55, 1956-57 y 1957-58, éste último jugando al final con Culiacán), siendo un elemento de gran valía para la “tribu” durante dicha década.
Aunado a esto, Benjamín “Papelero” Valenzuela fue el primer jugador mexicano en vestir la casaca de Yaquis y jugar en el beisbol de las Grandes Ligas (Cardenales de San Luis).
René Arturo Rodríguez, presidente del Club de Beisbol Yaquis de Obregón, dirigió unas emotivas durante la ceremonia de entronización de Benjamín Valenzuela.
“Hoy es un día de fiesta porque el hijo pródigo ha regresado a casa. Una de las más grandes luminarias en vestir el uniforme de Obregón está con nosotros”.
“El homenajeado escribió de su puño y letra, con su bat y guante, historias inolvidables de nuestro beisbol invernal mexicano, el aquí presente era protagonista del campo. Su estatus histórico se gestó desde lo más abajo y logró, gracias a sus facultades y entrega, llegar a lo más alto del beisbol”.
“Me enorgullece como Presidente del Club Yaquis de Obregón, entronizar este domingo 26 de octubre a Benjamín ‘Papelero’ Valenzuela como uno de los inmortales de este Recinto Histórico”, manifestó René Arturo Rodríguez.
Emocionado, Benjamín Valenzuela agradeció al Presidente del Club Yaquis la distinción de estar en el Recinto Histórico, donde se encuentran las grandes figuras de la organización cajemense.
“La verdad no esperaba este reconocimiento, agradezco enormemente el que se me considere el estar con enormes beisbolistas, a muchos de ellos no tuve la oportunidad de conocerlos, pero se de sus grandes hazañas y logros por los que están aquí, y para mí es un honor estar entre esos grandes inmortales de Yaquis”, dijo Benjamín Valenzuela.
Desde hoy, la placa conmemorativa de Benjamín “Papelero” Valenzuela quedará plasmada para la eternidad en el Recinto Histórico, desde hoy, es ya un inmortal Yaqui.