Bienvenidos a la realidad, en menos de diez minutos la selección alemana clavó dos goles con cierta facilidad y puso al Tri en su verdadera dimensión, la de un equipo mediocre.
Poco después vino el tercero y cuando el Tri anotó su único gol, los alemanes le clavaron el cuarto solo para seguir con su día de campo en la cancha.
Ahora vendrán los análisis, las discusiones en las mesas de comentaristas televisivos, se buscarán pretextos, salidas fáciles, explicaciones absurdas, se buscarán culpables y algunas pedirán ya la renuncia el colombiano Osorio como entrenador de la selección mexicana.
Empezarán a hablar de los posibles sustitutos, que si el Piojo, que si un técnico extranjero... Mucha palabrería para esconder una verdad sencilla: Este es el nivel del futbol mexicano hoy.
Pero los medios de comunicación en el centro del país y las cadenas deportivas de cable seguirán hablando del futbol mexicano como si fuera el mejor no de esre planeta, sino de todo el universo porque en algo hay que distraer a la población a menos de un año de las elecciones federales.