Hace arte con objetos de narcoejecuciones
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Viernes 22 de Junio de 2007
Culiacán.- La exposición "Navajas" fue abierta a finales de mayo pasado en el Museo de Arte de Sinaloa (Masin), en esta ciudad, y en ella hay unos 30 objetos que muestran la actual situación de violencia que vive el estado de Sinaloa, cuna de célebres capos del narcotráfico.
De la muestra fueron retirados una camisa y un pantalón manchados con sangre, al parecer de una persona que fue asesinada con esa ropa, dijo una fuente del Masin.
La misma fuente dijo que la exposición ha sido visitada por numerosas personas y que la intención de la artista Rosa María Robles es sensibilizar al público.
Un portavoz de la Fiscalía de Sinaloa dijo que la Contraloría interna de esa dependencia inició una investigación para saber de dónde sacaron "estos indicios", además averigua la autenticidad de las prendas para después determinar por qué "se entregaron esas cobijas".
"Se investiga a personal de investigación criminalística y servicios periciales", agregó.
En la muestra hay una alfombra donde aparentemente una persona fue envuelta después de haber sido asesinada y donde hay restos de sangre, un método recurrente entre los sicarios para dejar su impronta.
En un comunicado del Gobierno de Sinaloa, emitido el 25 de mayo pasado, se afirma que "Navajas" es "una exposición provocadora e inquisitiva", en la cual la autora muestra "su preocupación por el creciente entorno de violencia que subyuga a la sociedad actual".
La directora de Museos de Sinaloa, Rosa María Hass, dijo entonces que presentaba la obra de la "controvertida artista sinaloense Rosa María Robles, que es un vuelco a la sensibilidad, promueve experiencias nuevas y desconocidas".
Además, dijo, "rompe con los reflejos condicionados y sus instalaciones brincan de lo cotidiano para convertirse en arte".
"Espero que esta muestra les cause un poco de dolor como me lo causó a mi realizarla", dijo la autora el día de la inauguración, según el comunicado oficial.
Habla la autora
Sobre su obra, la autora comentó al diario La Jornada:
"Navajas plantea una reflexión profunda sobre la creciente narcocultura, que ha ido invadiendo terrenos en todos los ámbitos de nuestra muy jodida sociedad", manifestó.
Entre la obra expuesta hay un támpax relleno de mariguana, una bacinica bajo un pantalón ensangrentado que perteneció a algún ejecutado, con la leyenda "estás meando fuera de la bacinica"; también hay piezas de lencería con mandíbulas de tiburón y cocodrilo, "que nos sostienen la mirada, que nos esperan, nos devoran, devoran al miembro masculino", explica.
La pieza final de la exposición es una foto gigante de la autora, desnuda, sobre un escusado y un ojo humano en cada mano, cubierta con una cobija también ensangrentada y ese rostro suyo de dolor, de peste y podredumbre.
"Mis ojos están cerrados, pero los ojos humanos, que fueron de una persona ejecutada, observan al público, abiertos".