Jorge García E.
Jorge García E.
Sábado 04 de Agosto de 2007
Largamorosa es la primera planta del mundo que Adán y Eva encontraron segundos después de haber sido expulsados del paraíso. Allí se acostaron Adán y Eva, después de haber llorado su desconsuelo, por sentirse tan desolados. Y también, una vez curados del espanto de vivir con el sudor de su frente, se iban a coger en las tardes de junio, horas antes de caer la fría lluvia. La planta era de hojas muy pequeñas y esponjosas. Algo parecido a la verdolaga. Pero éstas dejaban un tenue olor, un perfume que se impregnaba en la piel y permitía situar el lugar donde estaba cada uno de ellos, cuando por alguna circunstancia se perdían en esos caminos.
La planta fue tan significativa, por lo anterior, que terminó siendo una cura para muchos dedsasegunes. Cuando la amada se perdía y no regresaba en días. Adán, ponía a hervir las pequeñas hojas y tomaba de ese te para despegar de él la nostalgia. Cuando se peleaban y su hígado se hinchaba, la largamorosa hacía tan perfectamante su trabajo que los obligaba a irse al lecho a olvidar todos los días.
La planta por alguna circunstancia fue desapareciendo del planeta cuando un pequeño gusano le encontró sus virtudes. Se incrementaron los gusanos hasta exterminar a la alargamorosa.
Las soledades y las nostalgias fueron tomando raros caminos. Y se esparcieron por casi todos los lugares del planeta. Y lo peor de todo es que no se ha encontrado otro remedio parecido.
Agora cuando los amantes tienen esa necesidad de tocarle un seno a su amada, o darle un beso debajo de su oreja. O sentir su mano en el sexo y ella por alguna circunstancia no está. Entonces inventan una historia de una planta que podría llamarse largamorosa.