Piden castigo a responsables de tragedia
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Sábado 10 de Novimiebre de 2007
Cd. de México.- El debate sobre las eventuales responsabilidades de los gobiernos del último cuarto de siglo en el desastre ocurrido en el estado mexicano de Tabasco continúa hoy con gran fuerza.
Mientras esa zona registra un proceso de lenta recuperación de los daños ocasionados por las inundaciones y el desbordamiento de ocho ríos, la discusión pública gira sobre la omisión de las administraciones en la prevención de lo ocurrido.
El ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador insistió en que la falta de obras de infraestructura hidráulica y el desvío de recursos asignados para ello son causas de la tragedia.
López Obrador aseguró también que la apertura de las compuertas de la presa Peñita vertieron dos millones de litros de agua por segundo y ese caudal arrasó parte de Tabasco.
Añadió esa presa no trabaja normalmente porque se disminuyó en 50 por ciento la producción de energía en las cuatro hidroeléctricas de la región para beneficiar a empresas extranjeras productoras ya del 30 por ciento del fluido consumido por el país.
El Secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, salió al paso de esas acusaciones, reiteró que todo ocurrió por causas climatológicas y consideró prioritario atender la emergencia dejando para después la búsqueda de culpables.
Llovió en tres días lo que normalmente llueve en un año, añadió, tras restar importancia a la demanda penal anunciada por López Obrador en base a sus imputaciones.
Mientras tanto, legisladores opositores propusieron en el Congreso la creación de una comisión investigadora que evalúe el tema.