La matanza de cerdos en el rastro municipal registra un leve repunte, luego de la caída que registró la semana pasada a consecuencia de la influenza humana y su relación con la trasmisión por consumo de productos porcícolas.
Modesto Saucedo Durán señaló que de mil cerdos sacrificados al día se bajó a menos de 10 al creer la población que podría contraer la enfermedad por la ingesta de la carne de cerdo.
El director del rastro municipal explicó que este fin de semana se elevó a poco más de 200 las matanzas de cerdo y se espera un repunte de manera paulatina.
“Ya con las explicaciones del sector salud y el cambio de nombre a la enfermedad esperamos que poco a poco se recupere el ritmo en la matanza de cerdos”.
La matanza de res, agregó, sigue de forma normal y no elevó su demanda durante la emergencia sanitaria.
“Las personas al parecer no elevaron el consumo de res durante esta contingencia, la matanza no tuvo mayor repunte”, puntualizó.