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Sería gravísimo que se politizara la operación de las estancias infantiles, pero ninguna de las 231 en el estado que pueda operar será cerrada, afirmó Gustavo de Unanue Galla.
El delegado de la Secretaría de Desarrollo Social en Sonora manifestó ayer que se inició una revisión junto con Protección Civil para determinar si deben hacerse modificaciones a esos edificios.
En menos de 30 días Sedesol ha hecho dos supervisiones a fondo, por la influenza y ahora por el incendio, y no hay problemas graves como para cerrarlas, como pidieron autoridades de Cajeme.
Las razones de Protección Civil local para pedir el cierre son por aspectos que no se manejan en este tipo de estancias, indicó, como la altura del extintor, el sentido de una puerta, rayas amarillas y otras igual de leves.
Sería gravísimo que se politizara este asunto porque, sólo en Cajeme, se afectaría a 800 familias que, independientemente de todo, no tienen la culpa de la politización de un problema surgido, destacó.
En Obregón se cambiará de lugar una estancia por estar en un edificio de dos pisos, mientras que en Hermosillo serán seis; en Guaymas y Bácum, una en cada uno, y dos en Navojoa.
Pero no se mudarán por incumplir alguna norma sino por estar en una zona inadecuada, expuso, y se buscará ayudar a las familias a hacerlo porque es un costo extra.
En el estado operan 231 estancias de Sedesol, expuso, con cuatro mil 600 niños, es decir entre 15 y 20 por cada una.
Es mucha la demanda en todo el estado de este tipo de guarderías, por lo cual en los próximos días se abrirán unas 20 más pero si el proceso actual se tarda hasta seis meses para avalar una, ahora con mayor razón porque se supervisará todo, manifestó, pensando en la seguridad de los niños.
