Aun cuando laboran en espacios muy reducidos e incluso a la intemperie el servicio postal mexicano no se ha interrumpido y sigue en tiempo y forma la entrega de cartas y documentos, afirmó Luis Uruchurtu Barrón.
Luego de abandonar las oficinas centrales de Correos por al peligro latente del desplome del techo, dijo, el área de clasificación de correspondencia y distribución fue albergado en las instalaciones de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FESTE).
“Estamos incómodos pero no hemos dejado de trabajar, el espacio es muy reducido y el aire acondicionado insuficiente e incluso algunos deben trabajar en el patio bajo la sombra de los árboles”, explicó.
A un mes y medio de dejar sus instalaciones aún no les resuelven el tiempo que deberán mantenerse en espacios prestados, indicó.
Los 27 carteros sigue laborando de forma normal distribuyendo entre 130 a 150 mil piezas al mes.
El Sindicato Nacional de Trabajadores del Servicio Postal Mexicano, añadió, solo ha comentado que se rentará un espacio para reubicarlos en breve.