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La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) determinó que el IMSS y su delegación estatal, la Unidad Municipal de Protección Civil de Hermosillo y la Secretaría de Hacienda de Sonora incurrieron en irregularidades que permitieron funcionar con severas deficiencias a la Guardería ABC, como no contar con salidas de emergencia, detectores de humo ni con el personal capacitado, emitir tarde una alerta de siniestro y no aplicar un programa específico de seguridad.
Tras una investigación, indicó que la guardería estaba cerca de comercios que representaban un riesgo, como un expendio de llantas y una gasolinería, además de no contar con banqueta, guarnición ni calle pavimentada.
Asimismo, incumplió con el oficio 279001320100/23180 del 26 de julio de 2005, en el cual el jefe de Prestaciones Económicas y Sociales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) estatal le pidió sustituir los plafones por material no combustible, y no sustituyó el material inflamable que cubrían los muros.
De acuerdo con el informe que será presentado hoy en Hermosillo por el ombudsman nacional, José Luis Soberanes, el IMSS no exigió la licencia de construcción de la remodelación del inmueble, ya que con una revisión a las instalaciones y las deficiencias en las obras, se hubiera negado la ocupación del edificio.
El organismo nacional concluyó que se violaron los derechos humanos, a la salud, la legalidad y la seguridad jurídica de los menores que se encontraban en la guardería, los que perdieron la vida, lesionados, familiares y de personal que ahí laboraba.
De acuerdo al informe, el IMSS y los responsables incurrieron en la inobservancia de las Normas Oficiales Mexicanas (NOM).
