En tanto ejidatarios denunciaron contaminación del arroyo Bachoco con aguas residuales, directivos de la empresa Kofanor aseguraron que se trabaja en la construcción de plantas de oxidación.
Blas Arellano Contreras, presidente del Comisariado del ejido Esperanza, indicó que no aguantan los olores emanados de las descargas al arroyo desde hace mes y medio.
Aguas arriba hay campesinos con bombas para regar sus huertas o darles a sus animales, además de que el arroyo descarga en el río Yaqui y perjudicará a los indígenas, dijo.
Ya acudieron a la Comisión Nacional del Agua, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Secretaría de Salud, expuso, y sólo la última emitió ya recomendaciones a la empresa.
La empresa fabrica alimentos para animales a partir de vísceras de cerdos, expresó, y al tirar sus aguas residuales al Bachoco los habitantes de los ranchos cercanos, sobre todo por las tardes, deben soportar fuertes olores.
Como no vieron respuestas de las dependencias, dijo, acudieron a los medios de comunicación para hacer la denuncia, ya que han confundido el arroyo con un dren.
Marcio André Martens, gerente de Konafor, expresó que tienen el permiso de la Comisión Nacional del Agua para descargas provisionalmente en el dren, pero no se trata de ningún elemento químico.
“Más bien son residuos con una alta carga orgánica y nitrógeno que incluso sirven para riego de áreas verdes, como se hará en las de la empresa en breve”, expuso.
Se descargan unos 70 metros cúbicos cada día de aguas residuales, indicó, pero sólo se hace cada tres días y el resto de los días se conducen hacia una laguna de oxidación provisional.
De cualquier manera ya se trabaja en la construcción de lagunas de oxidación definitivas, sostuvo, pues en dos o tres semanas estará listo el proyecto y en unos cuatro meses las fosas, con un costo de 1.5 millones de pesos.