Por abuso de autoridad serán demandados penalmente funcionarias de la Subprocuraduría de la Defensa del Menor y la Familia y agentes policiacos en Cajeme.
Óscar Castañeda Chávez, médico de la Unidad de Medicina Familiar del IMSS, declaró que en forma prepotente la jurídica de la subprocuraduría, Arlene Jaime, acudió a su lugar de trabajo junto con dos policías para hacerlo comparecer a la fuerza.
“Ella dice que ya me habían notificado hasta en tres ocasiones de ese trámite pero en realidad no fue cierto y por prudencia acepté ir con ellos para que no se armara más escándalo delante de los pacientes”, expresó.
Recientemente se divorció de Belia Angelina Soqui Rivera, destacó, que se había quedado con la custodia de las niñas, pero como se comprobó que las maltrataba, él ahora las tiene consigo.
Fue la madre de su ex esposa la que, por ser conocida de la funcionaria de la subprocuraduría, insistió en que quería convivir con las niñas pero fue con ellas el envío de los citatorios, los cuales nunca los vio.
Acompañado de su abogado, Raymundo Islas Camacho, el médico destacó que la orden de la subprocuradora Silvia Valdez Meza fue hacerlo comparecer a la fuerza sin antes investigar los antecedentes del caso y si había un juicio de por medio.
Y todavía en las oficinas de esa dependencia municipal, dependiente del DIF, lo insultaba la titular del área jurídica, sólo porque la familia de su ex esposa es conocida “y me dijo que les cree más que a mí”.
Y cosa curiosa, enfatizó, cuando él se acercó en mayo a la misma funcionaria para pedirle interviniera por el maltrato de que eran objeto sus hijas, no le hizo caso.
Por ello habrá de acudir a la justicia para acusarlas de abuso de autoridad, sostuvo, junto con los policías que amenazaron con esposarlo delante de sus pacientes en el IMSS.