Representantes de organizaciones no gubernamentales se manifestaron este lunes frente al Congreso del Estado donde exigieron a las autoridades de la entidad frenar los experimentos que en Sonora se realizarán con maíz genéticamente modificado.
Una de las manifestantes, Rosa María Oleary afirmó que el consumo de estos productos causa daños a la salud.
"Se ha comprobado en ratones experimentales que la ingesta de maíz transgénico ha ocasionado daños a nivel renal, daños de medula ósea y daños en las gónadas, en los aparatos reproductores", aseguró la luchadora social quien cuenta con estudios de ingeniería química.
Indicó que aún hay tiempo para que se de marcha a tras a dicho proyecto de cultivar maíz transgénico en campos de varios municipios del sur de la entidad.
La siembra del maíz genéticamente modificado comenzará esta semana. En total serán seis hectáreas, distribuidas en las localidades de San Ignacio Río Muerto, Huatabampo y Cajeme, con las que se aplicará el experimento.
De acuerdo a la asociación civil que impulsa el programa piloto, Agrobio, las pruebas van encaminadas a obtener especies que combaten insectos y la maleza y estarán supervisadas supervisados por instituciones como Inifap y el Instituto Tecnológico de Sonora (Itson)
La organización que representa a tres empresas privadas, ha asegurado que los productos que obtengan no saldrán al mercado de manera inmediata, pues primero deben demostrar que son útiles y no contaminan, por lo que pueden quedar sujetos a otros experimentos hasta obtener los resultados esperados.