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Así como enfermedades crónico degenerativas como cáncer, diabetes, hepatitis C han aumentado, incluso a edades tempranas, también la baja de los componentes de la sangre se ha incrementado.
El doctor Luis Solís Anaya, jefe de Hematología del Hospital General Regional Número Uno del IMSS, indicó que a ese mal se le conoce como pancitopenia y se presenta cuando los glóbulos rojos, blancos y plaquetas están por debajo de sus niveles normales.
Su nombre significa, precisamente, disminución de todas las células sanguíneas, destacó.
Ese mal favorece las infecciones constantes, aseguró, y produce anemia, fiebre, fatiga y palidez de la piel, entre otras manifestaciones.
En situación de normalidad, deben circular en la sangre de seis mil a 10 mil células de defensa o glóbulos blancos, y la hemoglobina, los glóbulos rojos, debe estar por arriba de 12 mil en la mujer y 13 mil en el hombre, dijo.
Y el parámetro normal de plaquetas es de entre 150 mil y 450 mil, destacó, y cuando las tres líneas celulares están bajas, entonces hay pancitopenia.
Se estima que entre 10% y el 15% de pacientes mensuales reciben asistencia por esta disminución en los componentes sanguíneos, informó.
El especialista del Seguro Social apuntó que no se trata de una enfermedad primaria, sino de una manifestación de disfunciones tales como leucemia, aplasia medular o trastorno de la médula que origina una alteración en el proceso de formación de glóbulos rojos, u otro mal que destruya células en sangre periférica.
La pancitopenia se clasifica en leve, moderada, grave y muy grave, y puede presentarse en ambos sexos a cualquier edad.
Para su diagnóstico, además de los estudios de laboratorio, generalmente se realiza un aspirado o toma de muestra de la médula ósea, pues es ahí donde tiene lugar la formación de las células sanguíneas.
Sus síntomas son muy variados y obedecen a la pérdida de células en la sangre y su severidad va a depender directamente de su descenso, refirió.
Entre los signos de esta enfermedad destacan el aumento de infecciones y fiebre; anemia, que se traduce en palidez de la piel, taquicardias, cansancio o fatiga fácil, afirmó.
Y también produce sangrados, por la falta de plaquetas, tanto internos, muy riesgosos, como externos, ya sea por nariz, encías o piel, donde se forman puntitos rojos o grandes moretones.
De ahí la importancia, sostuvo, de detectarla a tiempo y acudir al IMSS a un tratamiento adecuado.
