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Un contingente de alrededor de 500 mujeres marcharon hoy haciendo sonar sartenes, botes y matracas para manifestar su oposición al acueducto del Novillo.
Desde la calle Náinari y 5 de Febrero hasta el Palacio Municipal, las mujeres marcharon dos cuadras gritando consignas contra el proyecto central del Sonora SI.
Eran, en su mayoría, mujeres cuyo porte reflejaba buena posición económica, aunque también las hubo algunas de colonias populares, especialmente aquéllas que iban en la parte delantera del contingente cargando la lona frontal.
Al llegar a Palacio Municipal el contingente se paró frente a Palacio Municipal y aumentó el ruido de los sartenes, que golpeaban con cucharas, de los botes y matracas.
Y ahí estaban. Las jovencitas, las viejecitas o las maduritas. Mujeres de todos colores y no solamente por sus vestimentas o sus cachuchas y sombreros.
El ambiente subía de tono pues si una mujer sola puede armar un barullo, con la presencia de decenas la algarabía iba creciendo minuto a minuto.
“Este día en muchas casas no habrá comida”, comentaría un transeúnte.
Y no fue muy lejos por la respuesta: “N´ombre, a muchas de ellas les van a salir callos por estar tocando un sartén”, diría otro vecino que esperaba ser recibido en Infonavit.
Hasta la venta de camisetas, como la que un maniquí lucía, tomaba forma poco a poco hasta que pasadas las 10 de la mañana la marcha iniciaba rumbo al Palacio Municipal.
Mientras los organizadores pedían silencio para comenzar los discursos, las damas ni caso les hicieron con tal de hacerle mucho ruido al alcalde Manuel Barro Borgaro.
Luego de casi 10 minutos de estridencia, voltearon hacia el escenario donde Guadalupe Guerra Beltrán, Esther Castro Rivera, Clementina Almada Esquer, Marcela Cota Fuentes y Edelmira Gutiérrez, llevarían la voz cantante.
Llevarse el agua de El Novillo a la capital del estado sería, dijeron, una puñalada al corazón del Valle del Yaqui y a la mente de las actuales generaciones.
Por ello, expusieron al gobernador Guillermo Padrés Elías que entre más se intimide a quienes no apoyan la construcción del acueducto, mayor unidad habrá para defender el agua.
“Todavía está a tiempo para impedir que el sur de Sonora se vea afectado”, le dijeron al mandatario estatal.
“Y a ti, Manolo Barro, que Dios te perdone porque nosotras no”, puntualizaron.
