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El Gobierno Municipal y los industriales de la masa y la tortilla oficializaron el acuerdo que resuelve un conflicto que se venía presentando desde hace 10 años entre los comerciantes de este gremio.
Manuel Barro Borgaro manifestó que este acuerdo es resultado de las negociaciones y la voluntad de ambas partes para poner fin a la competencia desleal que se venía suscitando de forma desmesurada en este sector.
“Como autoridades tenemos la obligación de hacer cumplir el reglamento de comercio y oficios en la vía pública, por lo que este acuerdo será enviado a Cabildo para que las próximas administraciones le den continuidad y hagan que se respete”, expuso.
En este acuerdo, abundó, el comerciante se compromete a respetar una distancia de 200 metros o dos cuadras a la redonda de las tortillerías establecidas para la venta en la vía pública, cuyo permiso por vehículo será de 150 pesos.
Asimismo, a utilizar únicamente vehículos nacionales o legalizados para el desarrollo de su actividad, fijándose un plazo máximo de cuatro meses para cumplir al 100% con esta disposición.
Barro Borgaro aclaró que independientemente del acuerdo, los comerciantes deben cumplir con todas las normas de higiene y limpieza así como con el reglamento de Ecología que regula la contaminación auditiva.
René Apodaca Velderrain, presidente del gremio de comerciantes de tortillas agradeció a las autoridades municipales por enfrentar este problema añejo y brindarles certeza al hacer cumplir el reglamento de comercio y oficios en la vía pública.
“A los industriales de la masa y la tortilla nos congratula el hecho que se haya formalizado este acuerdo pues había mucha competencia desleal y esto nos permitirá conducirnos con respeto en el desarrollo de nuestras actividades” expresó.
