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Entre exclamaciones de justicia de parte de sus seguidores, el cuerpo de Sergio Vega, “El Shaka” de la música norteña, es velado en una funeraria de Esperanza.
Poco después de las 15:00 horas arribó a la Comisaría el féretro con los restos del cantante que fuera asesinado la noche del sábado en Sinaloa.
Debido a la gran cantidad de personas que deseaban verlo por última vez, los familiares del artista originario de Hornos decidieron sacarlo de la capilla de la funeraria donde lo velaban.
La tarde de este domingo los restos serían llevados al rancho del cantante en Hornos para rendirle homenaje, pues también ahí viven sus padres.
Muchos fans del “Shaka” indicaron que fue una verdadera injusticia privarlo de la vida, pues era un artista que se dedicaba sólo a su música.
Otros solicitaron a las autoridades de Sonora unirse a las investigaciones de la Policía de Sinaloa para dar con los responsables de la muerte.
El tramo cercano a la caseta de cobro de San Miguel es muy peligroso, expusieron, y ya son muchos los asaltos ocurridos en la zona.
Los simpatizantes de Vega, de 40 años, indicaron que siempre habrán de recordarlo como un grande de la música norteña.
Sus canciones siempre habrán de ser cantadas por el pueblo, expusieron, porque él provenía del pueblo.
Un hermano de Vega, Ramón, falleció hace unos seis años en un accidente automovilístico en la sierra de Sonora cuando acudía a un evento político.
Al recordarlo en una de sus canciones, una de sus admiradores dijo que él era “Músico, poeta y loco”.
Aunque muchas no podían creer lo sucedió, indicaron que escuchaban su música pero más bien lo admiraban por guapo.
Al parecer los familiares del cantante ofrecerán este lunes una conferencia de prensa.
