Antes de que el basurero municipal sea clausurado, el Ayuntamiento de Cajeme debe sentar a las empresas en conflicto por el relleno sanitario porque ya es urgente, declaró Rodolfo Flores Hurtado.
El delegado en Sonora de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) indicó que tanto la licitación de la obra como el terreno están en medio de conflictos legales.
Esa situación ha originado que se ahuyenten las inversiones que el gobierno federal iba a realizar en Cajeme para mejorar el sistema de recolección de basura, indicó.
Ya en otros municipios se ha podido avanzar con la clausura de los “basurones” a cielo abierto, dijo, y se les han otorgado recursos para construir los rellenos sanitarios.
Pero mientras en Cajeme prevalezca el pleito legal que desde el año 2000 entabló una empresa que perdió el concurso por la obra, nada se podrá hacer y se corre el riesgo de que el actual basurero sea clausurado.
Con el depósito de los desperdicios a cielo abierto no solamente se contamina el ambiente sino la salud de la población, consideró.
Se pedirá al gobierno del Estado establecer un plan de destino de los residuos sólidos, con metas y plazos, para que los diversos municipios cuenten con rellenos sanitarios, indicó, o se corre el riesgo de aplicar sanciones a los que no lo hagan.