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La carretera de cuatro carriles de Sonora podría ser vendida a particulares y entonces sí la perderían los ciudadanos sin que se cumplan las promesas de modernización, advirtió Regino Angulo Sánchez.
Como ex integrante del Patronato pro Construcción de la Carretera, expuso que existen indicios que apuntan hacia la privatización de la vía federal, por lo cual Sonora se quedaría indefinidamente sin ella.
“Sería un auténtico caso de despojo de un bien que fuimos los propios sonorenses los que ayudamos a construirlo, pues incluso ayuntamientos como el de Cajeme dejaron de hacer obras para aportar recursos”, expresó.
Lo que se vendería sería un carril construido hace 60 años, manifestó, y otro que hicieron los sonorenses sin recurrir a ningún tipo de deuda.
Años después se entregaría la carretera a cambio de otras deudas, por unos mil 700 millones de pesos, aseguró, pero durante esos 15 años ya ha generado unos nueve mil millones, con lo cual la deuda ha quedado saldada completamente.
Por lo tanto, consideró, el gobierno federal ya no tiene nada qué hacer en la carretera de cuatro carriles, sobre todo porque ninguna promesa de mejoría ha cumplido, la última de ellas del presidente de la República sobre los cinco mil millones de pesos que no se han visto.
Se aplaude la labor de diputados como Onésimo Mariscales Delgadillo, quien anunció la posibilidad de eliminar la caseta de Fundición, pero como eso ya se ha dicho muchas veces, hasta no ver no creer, puntualizó.
Lo que se debe exigir como sociedad es cuentas claras sobre el manejo de los recursos de la carretera, sostuvo, porque de los ingresos un 30% debió destinarse a mejorarla, pero han pasado muchos años sin que se le haga un mantenimiento como debiera.
De cualquier manera, el Frente Amplio por el Libre Tránsito de Sonora está listo para el llamado de sus legisladores para cualquier acción, si una vez más no se les cumple, manifestó, pues ya es tiempo de ponerle alto a tantas promesas incumplidas y con sólo quitar la caseta de Fundición no es suficiente.
