Entre quienes se quedan estancados en la producción de un artículo, sin voltear a ver quién lo está rebasando por la izquierda, y quienes hacen todos los días de la innovación su estrategia empresarial, Gustavo Almada Bórquez seleccionó la segunda opción.
Lo que en 1985 comenzó como una empresa para la distribución y acarreo de cemento a granel, con unos cuantos silos, dos años después tendría una planta de cribado y triturado y, en 1989, obtiene la primera planta de prefabricados de concreto.
El trabajo arduo permite que la empresa crezca hacia Hermosillo y el 2005 instala en Hornos una planta de prefabricados automatizada y con mayor capacidad.
No conforme con ofrecer solamente bloques, arena o cemento, Almada Bórquez y sus colaboradores aprenden cada día de la experiencia diaria de los arquitectos, ingenieros y albañiles y su imaginación observa siempre el futuro.
Genera productos
De esa manera,el año 2004 comienza con la producción de materiales llamados “Morter plus” y “Concret plus”.
Se trata, dice, de polvos elaborados con cementos, áridos y aglomerantes de calidad que permiten obtener un mortero con características de manejabilidad, adhesividad y alta resistencia, mejores que los productos normales.
Ese tipo de productos, afirma, permite que solamente se necesite agua para hacer uso del mortero, incluso sin experiencia en la industria de la construcción.
La velocidad y control de calidad que ese tipo de productos permiten, ha logrado el ahorro en los costos de construcción y mayor duración de la obra, señala.
Además del pegablock diseñado por personal de esta empresa, ya se cuenta con otros como “Ceniza fly ash”, un material puzolánico, un aglomerante hidráulico, producido por la mezcla íntima de un material conocido como puzolana y cal hidratada, finamente molidos.
Aislante térmico
Al “Grava plus”, agregado extraído del cauce del río, se le suma otro producto ideado en Carolina Block, el llamado “Bio creto”, un concreto a base de mezcla de cemento, aditivos y agregados térmicos ligeros y antireflejantes que forman un aislante natural.
A todo ello se le suma una gran diversidad de artículos como el block 12, block 15, block 10, block 13, block 20, al-bein, adoquín 20 por 20, adopasto, celosía 20 por 20, block 12 cara cortada, block 15 cara cortada, block 20 cara cortada, loseta 6 liso y arquitectónico.
Han diseñado también una serie de herramientas muy útiles para los albañiles, que van desde el hilo, una bolsa, martillo y cepillo de mampostería, así como una cuchara punteada, cucharas de calafateo, junteadores, sujetador de hilos y niveles especiales.
Universidad Carolina
Con presencia en prácticamente todo Sonora, esta empresa lleva el nombre de Carolina en homenaje a la madre de su dueño y se festeja el 3 de noviembre, cuando se recuerda a San Carlos Borromeo, que se ha convertido en santo patrono del negocio.
De hecho este mes se han realizado los festejos de los 25 años de la empresa, en Obregón, Guaymas, Hermosillo y Santa Ana, donde se instaló una nueva sucursal.
El accionar innovador de Almada Bórquez le ha llevado a crear dentro de su empresa la Universidad Carolina, única en el país, cuyo objetivo es estudiar las propiedades mecánicas y químicas de los productos, así como innovar y mejorar todos los productos.
Pero, sobre todo, se busca capacitar en forma gratuita a los albañiles y a la comunidad en general que desee saber los principios básicos de esa actividad, a fin de que puedan ofrecer un servicio de calidad.
“Al obtener capacitación y mejorar en su trabajo, los albañiles brindan rendimiento y calidad, lo cual se traduce en mejoras para su familia”, refiere.