La Dirección de Inspección y Vigilancia ha multado a los tortilleros que no respetan el acuerdo de realizar venta ambulante a más de 200 metros de un establecimiento, aseguró Roberto Campos.
Las sanciones ascienden hasta los 20 salarios mínimos y pueden llegar al retiro del permiso para venta ambulante si se insiste en violar el acuerdo, advirtió el titular de Insepcción y Vigilancia.
Actualmente el Ayuntamiento ha otorgado alrededor de 100 permisos para venta ambulante, cada permiso cuesta cien pesos mensuales.
Campos respondió así a las declaraciones de René Apodaca Velderráin, tortillero y representante de un grupo de propietarios, quienes aseguran que la entrega de permisos ha sido indiscriminada y quienes los recibieron violan el acuerdo y envían a sus empleados en motocicletas o automóviles a vender en puntos cercanos a las tortillerías fijas.
Lo hacen de manera ostentosa, había dicho Apodaca Velderráin , porque las autoridades de policía y tránsito no sancionan a los vendedores quienes suelen exhibir un permiso apócrifo, sólo una fotocopia inválida y con eso convencen a los agentes.
Hay casos en los que un solo empresario del sector tiene hasta siete permisos pero pone en circulación más de 15 vendedores ambulantes y les dan copias fotostáticas que sirven para convencer a los policías.
Apodaca Velderráin denució que ha sido víctima de amenazas de muerte por uno de los tortilleros que tiene más de 10 unidades móviles y las trae recorriendo las calles de las colonias para vender su producto en puntos que no respetan el mínimo de 200 metros de distancia de una tortillería.
Apodaca es propietario de la tortillería Marilú, ubicada en la calle Calfiornia 2510, colonia Constitución.