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A fin de crear una conciencia en la ciudadanía con relación a la conservación de la vegetación del Municipio, la Dirección de Gestión Ambiental para el Desarrollo Sustentable informa que ya culminó la temporada de poda de árboles.
Martín Villa Ibarra, titular del área, manifestó que a partir del 31 de enero las personas que necesiten podar, talar o transplantar un árbol, tienen la obligación de solicitarles un permiso.
“El tener nuestra anuencia para cualquiera de las acciones antes mencionadas, disminuirá el número de sanciones provocadas por la falta de información, ya que la multa a aplicar equivale aproximadamente a 5 mil pesos”, expresó.
Explicó que los árboles brindan muchos beneficios ambientales como la purificación del aire y la reducción en la temperatura, por lo que si no son podados adecuadamente se pueden ocasionar múltiples daños a la biósfera.
El propósito principal de una poda, abundó que es contribuir a que los árboles estén fuertes y sanos, lo cual sólo se puede lograr en los meses de noviembre, diciembre y enero, pues es la época en que se encuentran en reposo y se reduce al mínimo la pérdida de savia y resina en el corte de las ramas.
