Porque sus ventas han mejorado, los coqueros y raspaderos de la Laguna del Náinari están dispuestos a liquidar en breve el adeudo que tienen con el Ayuntamiento de Cajeme por concepto de puesto semifijo, aseguró Guadalupe Leyva Félix.
El dirigente de los permisionarios de la laguna manifestó que sostuvieron una reunión entre los 37 comerciantes, donde se tocaron varios puntos, entre ellos el tema de la deuda y todos aceptaron de ponerse al corriente en sus pagos.
“Les hicimos ver la importancia de cumplir con nuestras obligaciones y aceptaron pagar la deuda con el Ayuntamiento, pero además porque en caso de interponer un amparo se ocupa que todos estén al corriente en sus pagos”, agregó.
Las ventas han mejorado, reconoció, no solo por las fuentes sino también por el cambio de temperatura que atrajo más visitantes al lugar, pero también dejó en evidencia la necesidad de mayor espacio para estacionar los vehículos.
“En el mejor de los casos hemos tenido un incrementos del 20% en comparación con otros años en la misma fecha, pero no fue parejo, ya que a algunos coqueros les afectó la prohibición de estacionarse en uno de los carriles”, señaló.
Leyva Félix manifestó que los permisionarios todavía siguen en la espera de una próxima reunión con el Alcalde de Cajeme, donde se expondrá las nuevas propuestas de reubicación que desarrolló la Secretaría de Desarrollo Urbano.