Hasta tres kilos de peso suben los niños en vacaciones a consecuencia del sedentarismo y por la comida en exceso que consumen, mucha de ésta chatarra, dijo la nutrióloga de la Jurisdicción Sanitaria número 4.
Marisela Juárez Montes expresó que depende del organismo de cada menor, algunos pueden llegar a subir más kilos en los casi dos meses de vacaciones que tienen antes de regresar a clases.
“Es más fácil trabajar con adultos en la cuestión de bajar de peso, porque a los niños se les antojan mucho las sabritas los dulces, los chocolates y es más difícil para el comprender que por salud se tiene que cuidar, pero en un mes pueden los niños bajar esos tres kilos, a lo mucho en dos meses”, expuso la nutrióloga.
Además del tipo de alimento y en las cantidades que suelen consumirlo los menores, la inactividad es lo que provoca el aumento de peso, ya que no queman las calorías en la misma proporción en la que las consumen.
“Sería recomendable que los padres tuvieron un control más del tiempo que ellos están en esos momentos de inactividad y que aparte de eso le den tareas en el hogar, mijito te toca recoger tu cuarto, limpiarlo, para que el niños se esté moviendo de aquí para acá y ese es un gasto de energía a que este sentado nada más viendo televisión o en la computadora”, añadió.
Recomendó además a los padres, prepararles frutas y verduras a sus hijos de manera creativa para volverlas más atractivas y las consuman en mayor porción.
“Ahorita están de moda los pepiguates, que es un vaso de pepino con cacahuates, pero en los lugares donde los compran, te preparan el vasito con mas cacahuate y chile, lo que pueden hacer en casa es echarles más verdura, pepino, jícama y por qué no, con un poco de picante y jugo de tomate”, añadió Juárez Montes.