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Las mismas frases, las mismas promesas, la misma gente, pero no el mismo Borrego.
Porque el "Borrego" Ernesto Gándara Camou no es el mismo que hace apenas tres años vestía de camisa roja permanente hasta que fue desechado por el PRI Sonora de Eduardo Bours.
Es ahora otro precandidato pero ya no busca la gubernatura; ahora quiere ser senador.
Su entorno ha dejado de ser el rojo boursista y ahora es el verde. ¿De la esperanza? ¿O de las alianzas PRI - Panal - Pvem?
Así luce el esencario, verde y blanco, que preside la figura rolliza de Ernesto Gándara Camou en el local de eventos que un día fue de Banrural, en esa callecita entre Chihuahua y 5 de Febrero, atrás de la Volkswagen.
Y el preca habla, promete, no deja de leer una hojita donde están los nombres de los "espontáneos" que le pidieron intervenir para salvar al pueblo.
Lee en el estrado y baja de él para acercarse a los presentes, habla de cerca con ellos, recorre las mesas donde se sentaron los cientos de invitados venidos de diversos municipios del Sur de Sonora.
Hay entre la multitud agrcultores ricos, exdiputados y otros que alguna vez fueron figuras priistas y un día los unió Eduardo Bours... en su contra.
Entre los que dicen saber de política se teoriza el momento: ¿Quién está detrás?
Y surge inevitable la teoría de la conspiración: Están Manlio y Ricardo, pero también está una facción panista.
Qué Dios nos agarre confesados, murmura un opinador y su ironía provoca risitas entre sus acompañantes.
Mientras tanto Ernesto Gándara sigue hablando, dando pasos en la precampaña, todavía falta un año, como lo dijo él mismo, pero no se puede quedar atrás de otros que ya están también en plena precampaña, a tambor batiente, dirían los antiguos.
