En la casa de la familia Carrasco Soto ubicada en La Tinajera, por 25 años utilizaron letrina en lugar de un baño común, al no haber servicio de drenaje en esta comunidad.
En esas dos décadas y media cavaron varias fosas sépticas en la parte trasera de su domicilio, cuando se llenaba una, la cerraban y hacían otra.
La insalubre situación de los Carrasco Soto, en la cual también se encontraban 64 familias más de La Tinajera, terminó al instalárseles biodigestores además de un baño con carga y descarga.
Los aparatos que en total tuvieron un costo de 5 millones de pesos, harán la función de tratadores de los residuos del agua utilizada en casa, desde la que se empleo para lavar los platos, hasta la del baño, informó Eric Trigueras Durón.
El director general de Programas de Mejoramiento Ambiental de la Comisión de Ecologia y Desarrollo Sustentable del Estado de Sonora (CEDES), expuso que los biodigestores evitarán que el agua que diariamente usaban en los 65 hogares y los desechos fecales sigan filtrándose y contaminen el subsuelo.
Además de tratar el agua y evitar la filtración al subsuelo, los biodigestores acabarán con los malos olores que emitían las fosas sépticas, las cuales ya no utilizarán los beneficiados.
El funcionario añadió que las ecofosas que se les instalaron a las familias, vienen acompañadas de un huerto que se sembró en su traspatio en el cual, podrán reutilizar el agua tratada la cual estará apegada a los parámetros que marca la SEMARNAT para uso agrícola.