La quema de paja de trigo en el Valle del Yaqui es un problema grave de contaminación ambiental pero la Fundación de Apoyo Infantil Sonora (FAISON) hace 15 años descubrió la forma de aprovechar esa paja para no tener que ser quemada.
Con el apoyo de la Universidad de Arizona, la fundación inició con la construcción de casas con pacas de trigo y paja de trigo combinada con adobe y techo de carrizo, siempre a beneficio de familias de colonias con altos niveles de pobreza y que habitaban en una casa de cartón informó Jorge Valenzuela Romero.
El presidente de la fundación dijo que en esos 15 años, han construido 100 viviendas ecológicas con pacas de trigo, cada una con un valor promedio de 80 mil pesos pero si la familia pone la mano de obra y además logran que agricultores les regalen pacas de trigo, se puede reducir más del 40 por ciento el costo de la casa.
“La casa ecológica tiene muchas ventas, uno es lo térmico en tiempo de calor es mucho más fresca que construir con block o ladrillo en invierno es más tibia, es fácil y rápido de construcción y lo mejor es que evitamos la quema de la paja de trigo que tanto daño le hace a la salud”, mencionó.
Para construirla, se sigue el mismo procedimiento que una vivienda normal, pero las pacas de trigo suplen los ladrillos y son cubiertas con una gruesa capa de abobe o de barro.
En las colonias donde se han construido casas con pacas de trigo y otras con una mezcla de adobe con paja de trigo son la Beltrones, Aves del Castillo y la Severo Girón en Providencia, en las cuales en pleno verano, se logra estar sin refrigeración y la vivienda permanece fresca.
Esta modalidad de viviendas fue lo que llevó a FAI Sonora a ganarse en días pasados el premio al Mérito Ecológico CEDES 2011 en la categoría de Organización no Gubernamental.