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“A ver si de a poquitos nos hace caso”, ironizó el regidor José María Parada, mientras sostenía una manta con la leyenda de No al Novillo, acompañado de dos féminas en el exterior de un conocido hotel, donde en esos momentos se encontraba el gobernador Guillermo Padrés.
El ex líder del PRI Cajeme manifestó que aunque pocos, la idea de la manifestación es para dejar en claro la inconformidad que existe por la insistencia del gobierno estatal de hacer el acueducto para llevar agua a Hermosillo.
Hemos realizado marchas con miles de personas, pero ni así se cambia de opinión sobre el Sonora Si, ahora estamos probando con pocas personas con la esperanza que esta vez sí se nos atienda, agregó.
El agua del Valle del Yaqui es para la producción agrícola y no se puede sustituir de otra forma, explicó, lo que si es posible con el consumo humano si se desala el agua, además de que es más barato.
La defensa por el agua seguirá, comentó, pues nos animan casos como el de la presa Arcediano, en Jalisco, donde el gobierno del estado quería construirla para darle agua a Guadalajara, pero por presión social se desechó el proyecto.
