MONTERREY, N.L.- El gobernador Rodrigo Medina de la Cruz anunció esta tarde reformas a las leyes estatales para que en Nuevo León no pueda ser abierto ni un casino más.
Tras la masacre en el Casino Royale, el jueves pasado, que dejó como saldo 52 muertos, el estado promoverá modificaciones a la Ley de Desarrollo Urbano del Estado para prohibir explícitamente instalación de casinos, medida que deberá ser respaldada en las leyes de los ayuntamientos y con enmiendas a las disposiciones federales.
En conferencia de prensa, en la que estuvo acompañado del alcalde de esta capital Fernando Larrazábal, el mandatario comunicó que le presentó su renuncia el magistrado José Alfonso Solís Navarro, de la Primera Sala del Tribunal Contencioso Administrativo (TCA), quien dio protección legal a la casa de apuestas siniestrada y que había sido señalado de corrupto.
Medina anunció un plan para regular los casinos que operan en la entidad, mediante una revisión inmediata de sus medidas de seguridad, que emprenderán Protección Civil del estado y los municipios.
El estado revisará las resoluciones del TCA que han impedido las acciones de la autoridad municipal que buscan clausurar los establecimientos, como se han quejado algunos ediles.
Fue anunciada también una reforma a la Ley de Justicia Administrativa para que el Tribunal no pueda impedir que las autoridades revisen las medidas de seguridad en los casinos, como se quejó Larrazábal tras el incendio en el Casino Royale, donde no había salidas de emergencia.
Medina pidió a la Secretaría de Gobernación que regule los casinos que ya funcionan y que clausure los que violan los reglamentos, además de que transparente la información sobre los propietarios.
También le pedirán a la Secretaría de Hacienda que verifique si no hay operaciones de “lavado” de dinero en las casas de apuestas.
Debido a la confusión sobre la identidad de los casinos que operan con nombres diferentes a las de las empresas que los administran, se desconoce con precisión la cantidad de estos negocios que están abiertos en la entidad, una cifra que ha sido estimada en 53 por algunas fuentes.