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Los senadores panistas Javier Castelo Parada, Andrés Galván Rivas María Serrano Serrano, del PRI, Alfonso Elías Serrano y Heladio Ramírez y del PRD Armando Contreas, poropusieron crear una comisión plural especial que dé seguimiento al conflicto generado entre el pueblo Yaqui, los productores del Valle del Yaqui y el gobierno de Sonora por la construcción del llamado Acueducto Independencia, a fin de que las autoridades competentes actúen con apego al Estado de derecho y alcancen un acuerdo justo que permita el beneficio de ambas partes.
A través de un punto de acuerdo presentado en la sesión ordinaria de la Cámara Alta, los legisladores consideraron que Sonora vive una situación tensa debido a la construcción de un acueducto por el que se pretende desviar agua del Río Yaqui a Hermosillo.
“La situación ha llegado a un grado de conflicto entre autoridades del estado y los productores, entre los que se encuentran el pueblo Yaqui, pues este último sostiene que el Acueducto Independencia representa un golpe existencial para la tribu Yaqui y una lesión progresiva a las capacidades productivas del Valle del Yaqui, región en donde se produce cerca del 50 por ciento de la producción nacional de trigo, al igual que se produce maíz, frijol, algodón, cítricos, nogal y alfalfa, entre otros.
“Y por su lado el gobierno de Sonora destaca que esta obra aportará grandes beneficios, pues garantizará el abasto de agua de por vida para los futuros desarrollos inmobiliarios de Hermosillo”, expusieron.
Mediante el Acueducto Independencia, añadieron, el gobierno de Sonora se pretende llevar 75 millones de metros cúbicos de agua, volumen con el que se siembran alrededor de 20 mil hectáreas de cártamo o 10 mil hectáreas de trigo.
Apuntaron que se le ha demostrado a las autoridades estatales y a la Conagua que Hermosillo tiene otras opciones para abastecerse, por ejemplo, --y la más sustentable--, una planta desaladora o canjear con el sector agrícola las aguas tratadas en su planta en construcción por aguas de pozos profundos hoy destinadas a la agricultura.
Castelo Parada, Galván Rivas y Serrano Serrano afirmaron que, derivado de la problemática que existe y sobre todo por los derechos de quienes se ven involucrados en el conflicto, es necesario que el Senado intervenga en la mediación del conflicto a través de una comisión especial.
“Esta comisión estaría integrada pluralmente y tendría como único objetivo allegarse de información y dar seguimiento a este conflicto, vigilando que las autoridades competentes respeten, en su caso, el Estado de Derecho y los derechos específicos del pueblo Yaqui, así como los del resto de los habitantes del sur de Sonora, buscando un acuerdo justo que permita el beneficio de ambas partes.
“Esta comisión debe ser un observador plural e imparcial que obtenga información institucional pero también de los pueblos y comunidades indígenas, organizaciones de productores y sociedad civil en general, que le permitan conocer las distintas versiones y las posibles alternativas de solución del conflicto”, apuntaron.
El punto de acuerdo se turnó a la Junta de Coordinación Política para su análisis y discusión.
