Han terminado las vacaciones y para miles de cajemenses es hora de volver a la realidad de las obligaciones impositivas: Declaración anual ante el SAT, pago de prediales, de placas y de otras obligaciones cuyos plazos se vencen en los próximos días.
El compromiso tal vez más importante es la declaración anual de impuestos que deben realizar miles de profesionistas, pequeños empresarios, arrendatarios y empleados que ganan más de 400 mil pesos al año.
Patricia Gastélum Padilla, directora local del Sistema de Atención Tributaria (SAT), señaló que la fecha límite para presentar esta declaración es el 30 de abril.
Dos semanas tenemos pues para correr con el contador, hacer ajustes, revisar facturas de ingresos y egresos, adentrarnos en el proceso que para muchos es un laberinto de datos y advertencias de multas que dejan extenuada a una clase media acosada por todo tipo de obligaciones impositivas.
También en las próximas semanas habrán de intensificarse los llamados a pagar los impuestos prediales, cuyo impacto en las arcas municipales es considerable sobre todo en los últimos meses de una administración que está obligada a dejar buenas cuentas a sus sucesores, provengan del partido que sea.
Por si esto fuera poco, aquéllos que no han hecho el pago anual de placas por falta de liquidez monetaria, verán en las próximas semanas agotarse poco a poco el plazo que extendió el Gobierno del Estado para los morosos.
Impuestos fiscales, prediales o por posesión de automóviles, más el pago de Imss e Infonavit para pequeños comerciantes, son parte del Vía Crucis que apenas empieza para miles de cajemenses.