A veces ocurren cosas difíciles de creer, y una de ellas es la que hicieron los constructores del área VIP de la Laguna del Náinari, es decir, el área al poniente acondicionada para la instalación de restaurantes y franquicias.
Resulta que a estos señores de mente práctica se les ocurrió cubrir con asfalto o pavimento la base de los árboles que hay en esa área.
No dejaron el círculo de rigor para que allí se acumule el agua que requieren los árboles. Prefirieron simplemente rodearlos de asfalto.
¿De quién fue la genial idea? ¿De los mismos que remodelan los parques de la ciudad cubriendo de concreto las àreas donde antes había césped y árboles?