Que nadie dude que el PRI propondrá el próximo periodo ordinario de sesiones en la Cámara de Diputados, aplicar IVA a medicinas y alimentos, como parte de la reforma fiscal “integral”, con la que busca recaudar más impuestos, aún entre los pobres; pues recordemos que los priistas son finos en eso de sacarle sangre hasta a las piedras.
El camino comenzaron allanarlo los priistas desde el año pasado, cuando en consejo político las diferentes corrientes al interior cerraron filas y aceptaron que se modificaran los estatutos del partido, para precisamente ser libres de proponer el gravamen sobre alimentos y medicinas.
Y aunque sobrevive en el tricolor un grupo crítico, nacionalista y apegado a los preceptos que dieron origen al Revolucionario Institucional, y que se opuso a cambiar los estatutos; éste fue vencido por las fuerzas reformadoras priistas que encabeza el presidente Enrique Peña Nieto con sus dos brazos en el legislativo Manlio Fabio Beltrones en la Cámara de Diputados y Emilio Gamboa en el Senado, así como Luis Videgaray como secretario de Hacienda.
Así, sin oposición al interior, prácticamente la única fuerza que detiene al partido; parece inminente que en el próximo periodo ordinario de sesiones quede aprobada una reforma fiscal que incluya IVA en alimentos y medicinas.
La salvaguarda que se está proyectando para los millones de pobres en México es dejar libre de impuesto una canasta muy básica de comestibles y medicamentos; con tal de apretar, pero no ahorcar a quienes usan el 100 por ciento de sus ingresos en la compra de alimentos y medicinas.
Y aunque hasta hace unos días los priistas evadían responder si propondrían IVA en medicinas y alimentos; esta semana la indicación es por que comience a fluir la información acerca de las virtudes de la reforma fiscal que propondrá el ejecutivo federal, elaborada en conjunto con los legisladores priistas. La virtud, que se eliminarán privilegios fiscales a las grandes corporaciones y consorcios que ahora no pagan impuestos o pagan muy poco. A ver si sí.
