La propuesta para el campo incluida en la Reforma Fiscal que impulsa el gobierno federal aniquilaría al sector agropecuario de México, advirtieron productores de la Asociación de Organismos Agrícolas del Sur de Sonora (Aoass) en una reunión sostenida con el diputado federal Faustino Félix Chávez.
Dicha Reforma contempla, entre otros objetivos, eliminar el régimen impositivo especial para las actividades agropecuarias, que recibirían el mismo trato aplicado a todas las actividades productivas, explicó Reginaldo Torres Rábago.
Con ello se eliminarían las tasas preferenciales que tienen los productores en el pago de impuestos y subiría el costo de los insumos que se emplean en las actividades del campo, afirmó el presidente de la Aoass.
Actualmente el impuesto tope para los agricultores es el 21% y de aprobarse la Reforma Fiscal pagarían el 32%, añadió Torres Rábago.
Reforma criminal
El agricultor Plutarco Pérez Aguirre Elías Calles calificó la propuesta como una reforma criminal "porque la rentabilidad del sector agrícola es marginal y si le quitan los incentivos fiscales se reducirá drásticamente su ya estrecho margen de rentabilidad, condenando al sector a su aniquilación".
"Quienes proponen la Reforma Fiscal piensan que todos lson agrotitanes pero se equivocan; la mayoría somos medianos y pequeños agricultores que vivimos de esta actividad y con el nuevo tratamiento fiscal desapareceríamos del mapa", agregó.
Consideró que se comete un error peligroso al pretender eliminar la deducción de impuestos fijada en 20 salarios mínimos para personas morales y de 40 salarios mínimos para personas físicas.
Asimismo, dijo, aplicar impuestos a los agroinsumos en función de su grado de toxicidad es bueno para reducir daños ambientales, pero pierde su sentido al pretender que dichos impuestos no sean recuperables para el productor. "Sólo encarecería los insumos", comentó.
La Reforma Fiscal propuesta sería la puntilla para el sector agrícola, reiteró, pues no considera que estas actividadades son muy susceptibles al impacto del cambio climático y sobre todo a las variación de los precios internacionales.
"Todos los países del mundo protegen su agricultura con subsidios fiscales, lo hacen por la necesidad de asegurar la soberanía alimentaria; en México se pretende hacer lo contrario, desproteger al sector primario... No es posible que Peña Nieto y quienes lo asesoran no se den cuenta de esto", puntualizo.
Por su parte Abel Castro Grijalva aseguró que la Reforma propuesta acabaría de manera definitiva con el sector social de la agricultura.
"Es un garrotazo que si no se detiene va a desaparecer al sector social y a varias empresas privadas relacionadas con el campo. Debemos acelerar la oposición a la Reforma", enfatizó.
Frenar al campo, frena crecimiento: FFCh
Aunque mi voto es a favor de la Reforma Fiscal en lo general, difiero de ésta en su propuesta para el sector agropecuario porque lo haría menos competitivo y más vulnerable, afirmó Faustino Félix Chávez.
El diputado federal por el Distrito 06 coincidió con los productores y explicó:
"La Reforma busca ser justa, eliminar excesos y simplificar el sistema tributario; es una propuesta con mucho sentido social pues impactaría en lo que hemos venido proponiendo desde campaña, como la reducción de tarifas de energía, eliminar el IETU y el IDE, éste último porque no cumple con el propósito de evitar el lavado de dinero y sí afecta al sector comercio y de servicios".
Además promueve el seguro social universal, con énfasis en la protección de los desempleados y pensionados, añadió.
"Pero en el caso específico del campo", dijo, "no puede aplicarse el régimen general impositivo porque afectaría al sector primario de la economía y con ello al crecimiento y generación de empleos que demanda el país".
Félix Chávez comentó que la propuesta para el campo en la Reforma Fiscal ha merecido poca atención por parte de los analistas nacionales, centrados ahora en otros aspectos de la iniciativa; incluso diputados de varios partidos consideran que los agricultores tienen demasiadas facilidades y no deben estar en un régimen impositivo especial.
Por ello, comentó, es necesario una participación más activa de los agricultores quienes a través de sus representantes deben concientizar a los diputados sobre los riesgos que implica dicha propuesta.
"Tal vez porque yo soy de una región agrícola soy más sensible a este tema, pero en otros diputados apenas si llama la atención y con ellos hay que reunirse para hacerles ver lo que está en juego".
Recordó que es poco el tiempo restante para modificar esta parte de la Reforma Fiscal.
"A más tardar para el 20 de octubre debemos fijar los cambios que los diputados propondremos a la iniciativa original, pues el 30 de octubre deberá aprobarse la Ley de Ingresos del 2014, mientras que el presupuesto federal o Ley de Egresos del 2014 deberá presentarse el 20 de noviembre".
La naturaleza del sector agropecuario obliga a darle un trato diferenciado, reiteró.
"Quienes vamos a participar en la legislación de las reformas propuestas por el presidente Peña Nieto tenemos la oportunidad histórica de impulsar los cambios que demanda el país, pero debemos ser cuidadosos en temas como éste del régimen impositivo a las actividades agrícolas", puntualizó.