Como una broma de mal gusto que contradice el espíritu de la inclusión social, fue considerado así el comentario del especialista cubano Orlando Terré Camacho, quien vino a esta ciudad precisamenta a exponer una conferencia sobre el valor de la inclusión.
Según el activista de Derechos Humanos, Rosendo Arrayales Terán, el incidente en el Centro Magno cuando Terré ofrecía a jóvenes estudiantes de la Escuela Normal una conferencia sobre el tema de la inclusión.
Al presentarse ante el público, Terré se calificó asimismo como "el Ricky Martin de la inclusión social", y los asistentes sonrieron.
Pero enseguida cambió sus palabras y precisó: "...no, no soy el Ricky Martín, soy el Chayane de la inclusión... hay que tener cuidado con eso de que uno es Ricky Martin".
Arrayales Terán consideró este comentario como una postura homofóbica al ironizar sobre la condición sexual de Martin, postura que contradice precisamente los valores de la inclusión social entre los que figura el respeto a la diversidad sexual.
"Fue un comentario implícito y despectivo haica la homosexualidad de una persona, y lo peor es que el comentario se hizo ante jóvenes que se están preparando para ser maestros y reproducir valores en el aula".
Arrayales aseguró que mucha gente del público entendió la broma así, como una ofensa
En otro orden de ideas, pero siguiendo con el tema de la inclusión, Arrayales criticó que sean los propios ayuntamientos y el Gobierno del Estado los primeros en no cumplir con la Ley 186 de Inclusión Social para Personas con Discapacidad en el Estado de Sonora al no contratar a cuando menos el 2% de personas con discapacidad ni generan infraestructura urbana a favor de dichas personas.