La introducción de una nueva cepa de camarón en la acuacultura sonorense ha permitido superar los daños propiciado por la enfermedad de muerte temprana, que venía diezmando a esta actividad, aseguró Miguel Ángel Castro Cosío.
Esta nueva cepa, explicó, fue generada en Ecuador y perfeccionada en un laboratorio de Texas, donde se reprodujo y se comercializó para regiones como Sonora.
Con la nueva cepa, añadió, se han logrado sobrevivencias hasta por el 60 por ciento de los alevines, mientras que la muerte temprana no permitía cosechar más del 30 por ciento, es decir, se perdía hasta el 70 por ciento de la producción.
Castro Cosío confió en el destierro definitvo de la muerte temprana gracias a la nueva cepa.