CD. DE MÉXICO.– En una reunión histórica, realizada en el municipio de Hopelchén, estado de Campeche, integrantes de los pueblos mayas, zapotecos y yaquis firmaron un pronunciamiento dirigido al Gobierno de Enrique Peña Nieto, en el que piden se respeten sus derechos humanos, particularmente su derecho a la autonomía, al libre desarrollo y al consentimiento previo e informado en relación con megaproyectos que pretenden desarrollarse en sus comunidades.
Destacaron que hasta el momento las consultas realizadas en sus territorios ancestrales se han hecho sin los procedimientos adecuados y “como un mero trámite” destinado a avalar la realización de los proyectos, “sin respetar nuestro derecho a la autodeterminación, sin proporcionarnos la información adecuada, sin respetar nuestros usos y costumbres, criminalizándonos y atacando nuestras autoridades y nuestros líderes”.
A nombre de la tribu yaqui, Mario Luna habló sobre las violaciones cometidas durante el proceso de consulta sobre el Acueducto Independencia.
Luna y otros participantes reiteraron su exigencia para que se cancelen demanera definitiva los megaproyectos que afectan al pueblo Yaqui, Zapoteco y Maya; en particular se nulifiquen los efectos de los permisos administrativos que fueron otorgados por el Estado mexicano en violación de nuestros derechos humanos.
Exigieron además:
–Respetar la autodeterminación y autonomía de los pueblos indígenas sobre su decisión de someterse a una consulta para el consentimiento, previo, libre e informado.
–Realizar procesos de consulta que sean de forma previa, libre, informada, culturalmente adecuada, respetando la decisión de las comunidades.
–Abstenerse de emitir comentarios con el objetivo de influir en la decisión de los pueblos consultados y que entreguen información de forma oportuna, objetiva e imparcial.
–Respetar el proceso de consulta para que este mecanismo realmente permita a los pueblos indígenas obtener justicia socio ambiental y eliminar las prácticas discriminatorias de las que históricamente hemos sido objeto; para poder realmente participar en la toma de las decisiones que nos afectan y para poder decidir efectivamente el futuro de nuestras comunidades.