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La violación al amparo promovido por la comunidad de Loma de Bácum en contra del paso del gasoducto por sus tierras demuestra el nivel de impunidad que se vive en todo México, afirmó Alfredo Rojas Díaz Durán, observador de Derechos Humanos.
En compañía de expertos de la Academia Internacional de Ciencias Ambientales, Rojas visitó la Loma de Bácum por invitación de sus autoridades y aquí afirmó que "se está violentando el debido proceso de órdenes judiciales a favor de comunidades indígenas".
Señaló que durante su estancia en Sonora solicitaron al delegado de la Secretaría de Gobernación, Wenceslao Cota Montoya, intervenga para que no ocurra un nuevo enfrentamiento ni se violenten los derechos de la comunidad de Loma de Bácum, solicitud que antes hicieron también a las cámaras de Diputados y Senadores.
"Hacemos un exhorto para que el desarrollo del gasoducto no afecte a las comunidades indígenas, que todo sea conforme a Derecho", dijo.
"No podemos permitir este tipo de violaciones a la convivencia pacífica del pueblo mexicano", reiteró.
El grupo de observadores de Derechos Humanos recorrió ayer las comunidades del Río Sonora afectadas por el derrame tóxico de la mina de Grupo México.
Y hoy, dijo Alfredo Rojas, "vimos que no solo el agua, el aire y la tierra están contaminados sino también una zona de Hermosillo donde hay contaminación nuclear".
